Uno de cada cuatro euros de la inversión española va a territorios de baja fiscalidad
La cifra se ha incrementado por cuatro en el último ejercicio completo Oxfam denuncia que las empresas pagan menos impuestos gracias a Holanda, Irlanda y a paraísos fiscales
La crisis ha elevado un 45% la inversión mundial que se dirige a paraísos fiscales y otros territorios de baja presión tributaria, un caudal de fondos que se ha multiplicado por cuatro en los últimos 15 años. España no es una excepción. Uno de cuatro euros españoles que se destinan a inversión va a parar a territorios fiscalmente opacos o de menor carga impositiva, según denuncia la ONG Oxfam Intermón en el estudio “El dinero que no ves, paraísos fiscales y desigualdad”. Un fenómeno que agrava la acuciante desigualdad social del país, concluye el estudio.
El montante destinado desde España a países con menor carga fiscal supera en un 27% a la inversión que se dirige a América Latina y el Caribe, territorios naturales de la expansión empresarial internacional más allá de las fronteras extracomunitarias, ilustra Oxfam. Y la tendencia va en aumento. En 2016, la inversión española a destinos fiscalmente más favorables se multiplicó por cuatro.
“Sin embargo, tan solo cuatro de estos territorios (islas Bermudas, islas Vírgenes Británicas, islas Caimán y Mauricio) están oficialmente en la lista española de paraísos fiscales que se ha ido vaciando peligrosamente en pocos años”, advierte Oxfam. “Muchos de los territorios con prácticas fiscales más agresivas quedan fuera de la lista oficial española, como es el caso de Panamá, Suiza, Holanda o Irlanda”, señala el informe.
Un listado que resulta clave para articular la lucha contra la elusión y la evasión fiscal. Así, desde la ONG, aplauden el incremento de las medidas de control que el Gobierno ha impuesto sobre las transacciones superiores a 100.000 euros que tienen como destino territorios offshore, pero advierten que “sin una lista objetiva y efectiva de paraísos fiscales la medida se quedará coja”.
En este sentido, Oxfam recuerda que países de la Unión Europea como Holanda, Irlanda y Luxemburgo se encuentran en la lista de los 15 estados “más agresivos de todo el mundo” en cuestiones fiscales. “Al ser territorios con un nivel de impuestos bajo o directamente nulo y resultar prácticamente opacos”, dice Oxfam, que califica también estos países de paraísos fiscales, “permiten a grandes empresas y grandes fortunas desviar beneficios y capitales que debería tributar en sus países de origen”. La situación, argumentan, “acentúa” la desigualdad generada durante la crisis.
“España ha sido el segundo país de la UE donde más ha crecido la desigualdad de renta, 20 veces más que en el promedio europeo”, cuantifica el estudio, que expone que desde 2008 la carga tributaria se incrementa entre los particulares mientras se reduce para las compañías.
“Antes de la crisis las familias aportaban el 74% del total de impuestos recaudados, para pasar a aportar el 83% en 2016, mientras que las empresas aportaron el 22% en 2007 y el 12% en 2016%”, subraya, detallando que mientras que mientras la recaudación del resto de tributos ha vuelto a niveles precrisis, el Impuesto de Sociedades arrojó un 52% menos de fondos en 2016 que ocho años antes.
Concretamente, 23.145 millones menos, equivalente a un tercio del gasto en Sanidad del país. La situación provoca una brecha de recaudación de 6 puntos frente a la media de países de la zona euro, dicen en Oxfam, instando a corregir la tendencia con una reforma contra la evasión fiscal.
Una reforma contra la evasión
Cómplices. Oxfam sostiene que aunque son principalmente las grandes empresas multinacionales las que aprovechan la baja tributación de otros territorios para escamotear el pago de impuestos donde deben, los gobiernos son “cómplices necesarios”, por lo que les insta a tomar medidas.
Nueva ley. Oxfam propone a España endurecer la lucha contra la evasión fiscal con una ley que identifique todos los territorios de baja fiscalidad con el objetivo de reducir la elusión a la mitad en cinco años y de reducir la presión tributaria sobre las pymes.
El origen del dinero. Desde Oxfam también recuerdan que el 54% de la inversión extranjera que llegó a España en 2016 lo hizo a través de alguno de los 15 territorios fiscales más agresivos el planeta.