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Estas fundas nos dejan ver el Samsung Galaxy A5 2018 con pantalla infinita

Nuevos detalles de este gama media

Samsung este año en la gama media ha hecho un muy buen trabajo. Hemos visto como ha conseguido que la gama A de 2017 sea todo un éxito, con un buen diseño, unos buenos materiales, excelentes apartados multimedia y una gran relación calidad precio. En resumen, un dispositivo que llegó para colocarse como uno de los mejores de su sector.

Con la llegada de los smartphones sin marcos y la famosa pantalla infinita de Samsung, nos preguntamos, ¿cuándo se implantará esto en la gama media? LG ya lo ha hecho, y seguramente Samsung no tarde mucho en seguirle, aunque también habrá malas noticias: subidas de precio.

El diseño del Galaxy A5 de 2018 revelado en estas fundas

En esta imagen observamos lo que ya se había rumoreado en las últimas semanas: la pantalla infinita llegaría a los móviles de gama media de Samsung. Como vemos, por la parte delantera, sería casi exactamente igual que el Galaxy S8, una noticia bastante buena dado que es uno de los smartphones con mejor diseño de todo el año.

Por detrás, también tenemos buenas noticias: o vamos a tener una doble cámara trasera para conseguir un modo retrato, o una única cámara y un sensor de huellas bien ubicado. Uno de los puntos más criticados de la gama alta de Samsung este año ha sido la posición de su sensor de huellas, y parece, según estas fundas, que se solucionaría.

En cuanto a características, veríamos un procesador Exynos de Samsung, acompañado de 4 GB de memoria RAM y 32 GB de almacenamiento. Poca evolución en cuanto a características de un año para otro, pero sí un gran cambio en el apartado del diseño.

La única sorpresa que nos quedaría para el año que viene es que tenga una doble cámara y que el sensor de huellas esté incorporado dentro de la pantalla, aunque es una apuesta bastante arriesgada porque lo más lógico es que Samsung la incorpore por primera vez en el mercado en su gama alta, no en uno de gama media.

Todos estos cambios de diseño y de hardware conllevaría una subida de precio que le podría colocar entre los 500 y 600 euros, siendo ya una gama alta, mientras que los Galaxy S8 y Note 8 se quedarían en la gama premium llegando casi, en algunos casos, a los mil euros.

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