CaixaBank defiende su liderazgo en España tras captar clientes de Popular
El banco afirma que es el primero en la banca minorista en España Destaca el crecimiento del precio de la vivienda que ayudará a deshacerse del ladrillo
La carrera por quién ganará la carrera de la banca comercial en España está disputada. Aunque la integración del Banco Popular en Santander el pasado junio podría poner en cuestión el trono de CaixaBank, el banco catalán ha asegurado este viernes en la presentación de sus resultados semestrales que conserva la primera plaza por cuota de mercado.
Su consejero delegado, Gonzalo Gortázar, ha reconocido que se han beneficiado de la salida de clientes durante la crisis del banco antes dirigido por Emilio Saracho. “Si una entidad tiene salidas, es notorio que como principal banco minorista es uno de los beneficiados”, ha explicado.
Así, según las últimas cuentas de CaixaBank controla el 25,7% de la cuota de mercado de la banca minorista española con un total de 13,8 millones de clientes. Una posición que mantiene también en nóminas (26,4% y 3,7 millones) y seguros, con un 21,7%.
Sin embargo, Gortázar ha admitido que en cuestión de balance la entidad que dirige se sitúa por detrás de Santander, una vez considerada la absorción de Popular. Algo que no ha sido óbice para que el consejero delegado considerase el crecimiento del balance como “elevado”, dado el crecimiento orgánico en España y la absorción del banco portugués BPI. Una entidad que aporta dos millones de clientes, 77 millones de euros al resultado y el liderazgo en el país en cuanto a fondos de inversión.
Sin comentarios sobre la independencia de Cataluña
El consejero delgado de CaixaBank, Gonzalo Gortázar, no ha querido manifestarse en cuanto a la situación del banco en el caso de que el Gobierno catalán termine celebrando el referéndum del 1 de octubre y en este gane el sí a la independencia. Preguntado sobre si la entidad cuenta con algún plan de contingencia o cómo valora la situación del banco, simplemente se ha limitado a asegurar que se encuentran “centrados” en ganar cuota de mercado y crecimiento orgánico “tanto en Cataluña como en el resto de España”. Eso sí, ha negado que hayan incluido alguna cláusula antiprocés en la compra de BPI. Cinco Días publicó que los inversores empiezan a reclamar estas medidas para blindarse ante una eventual independencia catalana.
La entidad financiera ha firmado los mejores resultados semestrales desde que tocara la Bolsa por primera vez en 2007 a través del debut de su holding Criteria, que sufrió una metamorfosis años más tarde, en julio de 2011, tras quedarse con el negocio bancario de La Caixa y renombrarse como CaixaBank. Ha incrementado su beneficio en un 31,6% hasta los 839 millones. La cifra, histórica para un semestre, se ha apoyado en la mejora del negocio bancario: aumenta los ingresos tanto por comisiones como por margen de interés, así como el derivado de su negocio de seguros y fondos de inversión.
Comisiones y créditos
CaixaBank ha incrementado lo que obtiene por la diferencia entre lo que recibe por prestar dinero y lo que paga por él –el negocio puro bancario– un 15% en lo que va de año. Una variación del 6,9% sin contar a su filial portuguesa. Las comisiones han aumentado un 23,9%. Un incremento que no se debe a que haya aumentado la cuantía que se carga sobre el cliente, sino por el aumento de la masa crítica de estos, según ha sostenido Gortázar. Y ha puesto el acento sobre que el 93% del negocio del banco procede de este tipo de ingresos, el que considera core.
Otra de las partidas sobre las que Gortázar ha defendido que se cimentan las buenas cuentas del banco es la cartera del crédito. Si bien el dato en su conjunto aumenta solo un 0,8%, el consejero delegado ha destacado el incremento del crédito de sano o de ayer calidad. Un aumento que se cimenta en la mejora de dos divisiones. La primera, de los créditos al consumo, que aumentan en España un 13,1% gracias al acuerdo con grupos retail como Mediamarkt. La segunda, el crédito a empresas, que ha avanzado en el país un 2,1%. Por el contrario, ha reducido un 5,3% el crédito promotor un un 78,8% la financiación con su matriz –Criteria Caixa- con el objetivo de dejarlo a cero en los próximos años.
Con ello, CaixaBank ha reducido el ratio de morosidad al 6,5% y el ratio de cobertura al 50% con provisiones para ello de 7.732 millones. Gortázar ha destacado la fortaleza del banco con respecto a la ratio del sector (8,7%), que corresponde a 15.492 millones de activo dudoso. La entidad alcanza una ratio de solvencia (CET-1 fully loaded) del 11,5%.
Ladrillo
En cuanto a la reducción de la cartera inmobiliaria, Gortázar ha asegurado que espera que el entorno de crecimiento moderado de los precios ayude al sector a deshacerse del lastre del ladrillo. En el caso de Caixabank, ha incrementado las ventas de activos adjudicados en un 12% hasta los 373 millones y ha mantenido las plusvalías por ellas en el 15% en el que las situó el trimestre pasado. Sin embargo, la actividad de gestión de estas carteras ha reportado al grupo unas pérdidas de 247 millones por la reducción de 107 millones de su participación en la Sareb realizada en el primer trimestre del año. Ha matizado que sin ese extraordinario el dato se hubiese situado en los 143 millones.
Finalmente, el máximo ejecutivo de CaixaBank ha saludado la medida adelantada por el Ministerio de Economía de facilitar el paso de las hipotecas a tipo fijo desde el tipo variable. En este sentido, ha alertado del impacto que puede tener para las familias con hipotecas variables (la mayoría en España) eventuales subidas de tipos. “Incentivar al mercado a que genere a tipo fijo es un gran acierto. La mayor parte de las familias va a sufrir ante el fin de los tipos cero”, ha dicho. Así, ha resaltado que dos tercios de las hipotecas que concede la entidad que dirige son de tipo fijo y ha defendido que esta sea la línea que debe seguir el sector.