Mercadona testará un almacén centralizado para su tienda en la web
Compra un terreno en Valencia para levantar un laboratorio de su venta on line Testará el nuevo diseño que pretende lanzar en 2018
Mercadona ya ha tomado una decisión en lo que será su futura compra on-line. El líder de la distribución en España ha optado por centralizar la gestión de lo que será su operativa a través de su página web en un almacén o almacenes centralizados a diferencia de lo que venía haciendo hasta ahora.
Según publicó la semana pasada el periódico Las Provincias, la compañía, propiedad de la familia Roig, ha comprado un almacén de 12.000 metros cuadrados en Valencia en donde pretende, a modo de laboratorio, testar la nueva forma en la que hará su venta en internet a partir del año 2018.
Adapta así un modelo más próximo al que desarrolla el gigante Amazon, en el que grandes centros informatizados se encargan de gestionar los pedidos. Hasta ahora eran las diferentes tiendas de Mercadona las que se encargaban de atender las compras que llegaban a la compañía desde sus zonas de influencia. Con este modelo la compañía reconoció en 2016 que generaba solo un 1% de sus ventas y obtenía 40 millones de pérdidas anuales.
Mercadona tiene que dedicar ahora parte de la fuerza laboral de sus tiendas a meter en carros individualizados la compra que llega via web, y desde alli enviarlas con furgonetas a los distintos domicilios. Cobra un plus por la compra on-line, pero el recargo, a tenor de las cifras desveladas por su propio presidente, que este mismo año calificó de "mierda" su tienda web, parece insuficiente para cubrir los costes físicos de hacer la compra en las tiendas, empaquetarlas enviarla a los domicilios, facturarla, atender las reclamaciones, recoger los productos enviados por error y volver a enviar los correctos.