Bank of America busca comprador para el 49% que tiene Popular en WiZink
WiZink está centrado en comercialización de tarjetas
Popular acelera el proceso de desinversión. La entidad ha dado el mandato a Bank of America Merril Lynch para desprenderse del 49% de su participación en Wizink. Los analistas cifran su valor entre 2.000 a 2.500 millones de euros, como adelantó Cinco Días. Este banco está integrado por las tarjetas de consumo y revolving adquiridas a Citibank y Barclays España y las del propio Popular y de su socio, el fondo Värde Partners. Pero la venta de las participaciones no se limita a esto.
El gran atractivo de Wizink reside en que se trata de una división orientada al consumo y es, según las estimaciones de los analistas la que más ingresos reporta a la entidad, unos 1024 millones.
WiZink, con una base de clientes de 3,3 millones, gestiona más de 3.100 millones en saldos de tarjetas y unos 2.300 millones en pasivo de clientes. Aunque no cuenta con sucursales, dispone de una plantilla de 2.700 empleados.En 2016 obtuvo un beneficio de 66 millones de euros.
Pero la venta de las participaciones de activos no estratégicos no se limita a esto. La entidad que preside Emilio Saracho ha encargado a UBS la venta de su negocio en Estados Unidos, TotalBank, operación que paralizó Emilio Saracho en su llegada a la presidencia.Está previsto que el proceso se cierre en dos meses, posteriormente quedaría el visto bueno de las autoridades. Con esta estrategia Popular lograría incrementar su ratio de capital fully loaded en un 2,5% adicional.Completadas estas operaciones la ratio de solvencia de ascendería al 10%.Precisamente las decisiones adoptadas por la dirección tienen como objetivo prioritario elevar sus niveles de solvencia.
Está previsto, además, que el banco retome la venta de su banca privada, operación que tenía previsto completar en septiembre, pero que finalmente paralizó, una decisión adoptada por el entonces consejero delegado, Pedro Larena. Una vez se realice esta venta, la entidad percibirá unas plusvalías de 200 millones.
Como parte final del proceso de ajuste, estaría la filial que Popular posee en Portugal, negocio que ha quedado reducido a sucursal. Además, Popular está a punto de cerrar la venta de una cartera de hoteles, principalmente, por 150 millones de euros a Blackstone.
Completado este proceso, Popular lograría incrementar su ratio de solvencia en 300 puntos básicos. Además, durante el primer semestre el banco ha sido capaz de reducir sus activos tóxicos en 400 millones por primera vez desde el estallido de la crisis financiera. A cierre de 2016 el importe de estos ascendía a los 3.600 millones. Con esto, Popular logra una reducción considerable de los APR, es decir de los denominados activos ponderados por riesgo.