Los impuestos preocupan a la pyme, pero no a la gran empresa
Las empresas más pequeñas son las que perciben la fiscalidad como uno de los aspectos que más afectan de forma negativa a su evolución
Según una encuesta realizada por el Instituto Nacional de Estadística (INE) sobre el entorno empresarial en 2016, el 39,3% de las pymes españolas que tienen entre 1 y 10 trabajadores señalan que la fiscalidad es el segundo aspecto que más les preocupa en el desarrollo de sus negocios, sólo después de la demanda de sus productos. Para las empresas que cuentan con una plantilla de entre 10 y 49 empleados los impuestos son la tercera preocupación, después de las ventas y el entorno macroeconómico.
Sin embargo, la fiscalidad no se encuentra entre las tres primeras inquietudes de las empresas medianas o grandes, con más de 50 trabajadores. Así, la demanda de sus productos fue, en todas ellas, el componente con mayor importancia en la capacidad de crecimiento del negocio, seguido del entorno macroeconómico y la regulación económica.
Por otro lado, las pymes que cuentan con una plantilla de entre 1 y 199 empleados señalan que la carga fiscal es el aspecto que tiene un mayor impacto desfavorable en sus negocios, mientras que las empresas más grandes consideran que es el entorno macroeconómico el componente que más afecta de manera negativa a sus actividades. Para las grandes corporaciones, la fiscalidad sólo se sitúa como el tercer aspecto de evolución desfavorable en su desarrollo. Otros componentes que presentan un elevado porcentaje de impacto negativo entre las empresas más pequeñas son la morosidad, el entorno macroeconómico y la regulación económica.
En lo que sí coinciden todas las empresas encuestadas, independientemente de su tamaño, es en que la demanda de sus productos es el componente que presenta un mayor porcentaje de evolución favorable, seguido del entorno macroeconómico. Para todos los tamaños de empresas, el tercer aspecto de evolución favorable fue, durante 2016, la disponibilidad de financiación, excepto para las más grandes, con más de 1.000 asalariados, que fue la adecuación del capital humano.
Otra de las conclusiones de la encuesta es que menos de una sexta parte de las empresas entrevistadas apreciaron un incremento en los recursos destinados a agilizar los trámites con las administraciones.