Pedro Mier: "La viabilidad económica de Ametic no está en riesgo"
Es el vicepresidente en funciones de la patronal tecnológica y el 9 de marzo podría ser su presidente. Critica que ha habido declaraciones a la prensa de las empresas que han abandonado la asociación con una clara voluntad de desestabilizarla.
Al cierre de esta edición, la candidatura de Pedro Mier era la única presentada para presidir Ametic. El plazo se acababa anoche a las 12. En su primera entrevista tras postularse para el cargo, repasa el cisma sufrido en la organización con la salida de pesos pesados del sector tecnológico como Telefónica, Vodafone, Orange, Indra, El Corte Inglés, Accenture, Ericsson o IBM, y avanza qué acciones llevará a cabo primero si sale finalmente elegido.
¿Qué pasará tras el día 9, porque si sale elegido presidirá una Ametic muy diferente, mermada en asociados tras la salida de muchos socios relevantes, y con menos recursos económicos?
Pasarán muchas cosas, y espero que todas buenas. Lo primero que haré, con la junta que me acompaña, será llamar a las empresas que han abandonado Ametic, porque aunque la decisión de salir es particular y absolutamente respetable, lo que nos gustaría es que volvieran. Y si deciden mantenerse fuera, porque tienen una problemática singular (como ese el caso de las operadoras), y creen que lo defienden mejor en otro terreno, buscaremos que la relación sea absolutamente constructiva. Todas las empresas que han salido son muy relevantes en nuestro sector y, lógicamente, queremos colaborar con ellos. Las puertas están abiertas; lo pasado, pasado está. Ahora se trata de aprender de lo vivido y haremos todo lo que esté en nuestras manos para que esas empresas vuelvan a encontrarse cómodas para que regresen.
“Lo primero que haré si soy presidente es llamar a las empresas que se han ido. Mi objetivo es recuperar la unidad y modernizar la asociación”
¿Y qué harán para tender esa mano?
Modernizar la organización, a través de una actualización de los estatutos, porque los actuales son el resultado casi por aluvión de lo que ha ido viniendo después de varias fusiones. Hay que recordar que Ametic es el resultado de la fusión primero de Aniel y Sedisi (que formaron Aetic) y después de Aetic y Asimelec. Como cuando se fusionan dos empresas, al final hay que dejar un tiempo hasta que las cosas se estabilizan y la cultura es la misma. Esa fase ya la hemos pasado afortunadamente, y ahora lo que toca es actualizar y revisar los estatutos para que se adapten a lo que es hoy la asociación. Es algo que ya estaba previsto en la candidatura anterior.
¿Cuando habla de modernización a qué se refiere, porque eso y más transparencia en la toma de decisiones es algo que reclamaban las empresas críticas?
No es cierto que eso sea una demanda solo del grupo crítico. Era una demanda compartida, global, como demuestra el hecho de que en todo este proceso que hemos tenido para llegar a una solución aceptable –en la cual ha jugado en contra nuestra la presión del tiempo- nos hayamos puesto de acuerdo rapidísimamente en todos los temas organizativos, de simplificación y modernización de la organización. Otra cuestión es que la asamblea no aprobara el tema de las ponderaciones de voto, a lo mejor porque había posturas maximalistas o por la presión del tiempo.
¿Pero a usted le parecía razonable esa petición?
Yo lo único que digo al respecto es que esa petición se presentó a la asamblea y esta tomó su decisión soberana. Cuando abramos el proceso de actualización de estatutos, con el tiempo y la calma necesaria, se discutirá y revisará todo lo que los socios estimen prudente revisar. En cualquier caso, será la asamblea la que tome la decisión como es lógico.
¿Y sobre la transparencia?
"Telefónica no necesita a nadie para tener voz, porque tiene medios, pero para tener legitimidad sí. Y ese es un valor muy importante que a veces se olvida"
No quiero polemizar sobre este aspecto, y lo único que puedo decir al respecto es que nuestra voluntad de transparencia es total, y que, a veces, es posible algunas dificultades de ese estilo como consecuencia de la propia estructura organizativa, que es lo que queremos también modernizar.
¿Es viable Ametic financieramente hablando? Se ha dicho que las empresas que se han ido aportan casi la mitad de las cuotas.
Sobre este punto han circulado informaciones inexactas. Es obvio que la marcha de asociados y la caída de cuotas supone un problema, pero eso no quiere decir que esté en riesgo la viabilidad de Ametic. Su solidez económica es total. El equipo directivo anterior, presidido por José Manuel de Riva, le dio un vuelco total a la situación económica de la asociación. Cuando nosotros entramos hace 4 años, los fondos propios eran casi inexistentes, y ahora son de más de 1,5 millones. Además, la asociación tiene dos inmuebles, en Madrid y en Barcelona, en propiedad. Por tanto, desde el punto de vista patrimonial no hay ningún riesgo. Otra cuestión, es que la caída de cuotas demandará adaptarse a la nueva situación. Pero, también tengo que aclarar que la caída no es más de un 25% de los ingresos de la asociación si cogemos el presupuesto cerrado del ejercicio anterior, no la mitad como se ha dicho.
¿Y corren peligro la celebración de eventos como el clásico de las telecos en Santander?
La situación que hemos vivido nos ha impedido hacer un evento que teníamos previsto, pero no el de Santander, el cual esperamos que este año como los anteriores sea un éxito. Este evento cuenta con todos los apoyos, es un referente del sector y ya tenemos empresas muy importantes de la industria que han confirmado su patrocinio y eso que aún no hemos empezado a moverlo.
¿Empresas como cuáles?
No puedo decírselas por discreción con las propias compañías, pero sí puedo asegurar que el evento no está en peligro. El evento ya se ha confirmado a la Universidad Menéndez Pelayo, porque ahora es cuando sacan las fechas. Será la primera semana de septiembre, y nos hemos puesto como objetivo que sea el mejor, como siempre, pero esta vez de forma especial.
Me cuentan que en una reunión de la junta la semana pasada, acordaron contratar a una persona para llevar a cabo una reestructuración. Que recortarán la plantilla a la mitad, de los 30 que son hoy.
Hay algo obvio: si en una organización se produce una caída de ingresos por el motivo que sea –en este caso yo diría que provocado por parte de algunas de las empresas que se han ido-, debe adaptarse a la nueva situación. No hay que olvidar tampoco que aquí hay también una estructura por aluvión (como ha pasado con los estatutos), como consecuencia también de fusionar diferentes asociaciones en un periodo corto. Eso ha llevado a una junta directiva enorme, a que haya cargos repetidos o funciones no bien racionalizadas.
“Ha habido declaraciones a la prensa con una clara voluntad de desestabilizar Ametic y, de ahí que planteáramos medidas en defensa de los asociados, pero no hay una demanda en marcha contra las empresas que se han ido por daños y perjuicios"
¿Pero se estaría barajando esa cifra?
Nadie ha hablado de cifras. El que diga que la mitad se lo ha inventado.
¿Y se está valorando subir las cuotas de los socios actuales?
No. En ningún caso.
Volviendo al cisma que ha vivido Ametic también se ha planteado como un pulso entre grandes y pequeñas empresas.
Sí, y ese es otro tema que no se ajusta exactamente a la realidad. Aquí lo que ha ocurrido es que los operadores han decidido que les convenía más abandonar Ametic. Esto no es algo bueno, pero tampoco extraño; en Digital Europe, la patronal de la industria digital europea tampoco están. Pero aunque su papel es muy importante (por el tema de la conectividad, del desarrollo de redes modernas…) solo son una parte del sector.
Pero aquí también han salido Indra, IBM, El Corte Inglés, Accenture…
Sí, es cierto. Pero este fue un proceso iniciado por los operadores y después empezó a viciarse. Creemos que fue una equivocación llevar el debate a la prensa en lugar de tratarlo dentro de la asociación, y eso generó unas percepciones que no siempre han sido ajustadas a la realidad, como el de la viabilidad económica, que ha influido en algunas empresas. Pero la dicotomía de grandes y pequeñas no es exacta. En Ametic hoy tenemos como asociados empresas tan pequeñas como Panasonic, Samsung, Huawei, Sharp, Microsoft, Google, Facebook, y españolas como Grupo Mondragón, GMV, Grupo Ormazabal, Grupo Tryo o Grupo Sedesco. ¿Cuál es más grande, Telefónica o Google? ¿Cuál es más importante para el desarrollo de la economía digital? Todas. Lo que ocurre es que juegan papeles distintos. En alguna prensa se ha difundido que Ametic es una asociación ahora de empresas pequeñas, poco competitivas, y eso no es cierto.
¿Cree que es posible defender por igual los intereses de pequeñas, medianas y grandes empresas?
“El encuentro de las telecos en Santander no está en peligro. Ya hay empresas que han confirmado su patrocinio. Y está confirmado a la Universidad Menéndez Pelayo”
Es algo obligado. Y eso nos ha llevado a defender tanto el principio fundacional de una empresa un voto. Este principio es bueno porque obliga a las empresas grandes a buscar puntos de confluencia con las que no son tan potentes, y ese es un ejercicio sano. Es obvio que las empresas más grandes tienen mayor papel a jugar y mayor voz, porque debe ser así, es lógico, pero el ir acompañadas de todo un sector da legitimidad a su voz… Telefónica no necesita a nadie para tener voz, porque tiene medios, pero para tener legitimidad sí. Y ese es un valor muy importante que a veces se olvida. Y la gracia precisamente de las asociaciones es buscar puntos comunes que permitan defender por igual, y por el interés general, cosas que favorezcan a todos. Ese enfrentamiento que se ha creado entre grandes y pequeñas es ficticio, no ha existido nunca. Hay que volver a reenfocar las cosas.
También me cuentan que en la última reunión y a propuesta suya se planteó demandar a las empresas que se han ido por daños y perjuicios. ¿Es así?
Eso hay que matizarlo. Yo no he planteado demandar a nadie, lo que sí planteé es la obligación que teníamos como junta directiva de defender los intereses de todos los asociados, y que en el caso de que una determinada actuación causase un daño económico o del estilo que fuera a los asociados, habría que considerar si eso era motivo de daños a terceros. Pero no hay una demanda en marcha. Lo que hay es una sensibilidad para defender a los asociados.
Pero las empresas son libres de irse si quieren. No entiendo lo que plantea de daños y perjuicios.
Está claro que las empresas son soberanas para tomar las decisiones que les convenga. Eso lo respetamos y no tenemos nada que decir. El problema es que aquí ha habido declaraciones a la prensa con una clara voluntad de desestabilizar Ametic y, de ahí que planteáramos medidas en defensa de los asociados. Esa es una obligación de la junta, pero no se ha tomado ninguna medida al respecto.
¿Y cómo prevé que pueda afectar a Ametic la creación de otra organización de mano de las empresas que se han ido, si finalmente se crea? ¿Teme que si surge se puedan ir otras compañías para sumarse a ella?
Crear una asociación alternativa creo que sería un gran error. No pienso que fuese en beneficio de nadie. Lo que hay que buscar son puntos de confluencia, intentar entender la opinión del otro. Además, iría en dirección contraria de lo que está pasando en Europa. No hay que pasar por alto dos hechos, que este es un sector que cada vez asume más una importancia multisectorial y que muchas empresas recién nacidas se convierten en las más destacadas.
"En la Agenda Digital debe ser prioritario la creación de empleo y empresas que lo generen"
¿Por qué cree usted que puede ser buen presidente para Ametic? ¿No teme ser visto como continuista y que ello impida la vuelta de los que se han ido?
Espero que no me vean así. Además, no hay que quitar importancia al papel que ha tenido José Manuel de Riva (presidente interino) en la recuperación económica de Ametic. Ese es un activo que hay que valorar. Por mi parte, creo que puedo darle la vuelta a la asociación, hacerla más flexible, moderna y recuperar la unidad y la estabilidad interna. Vivo el asociacionismo casi de forma genética: viví el nacimiento de Aniel, que fue la primera asociación del sector, desde el comedor de mi casa, pues mi padre fue uno de los fundadores y su segundo presidente. Me he dedicado a Aniel, a Aetic y ahora a Ametic, con distintos presidentes y equipos, y siempre defendiendo esta industria, la tecnología y la competitividad de nuestras empresas. También he fundado otras asociaciones: Proespacio y Aentec. Por genética y por vocación, siempre he creído en el asociacionismo. Creo que todos los países avanzados tienen organizaciones de la sociedad civil fuertes, y por la experiencia que me ha tocado vivir no sería esta la primera vez que me toca dar una vuelta de 180 grados a una asociación, ni será la primera vez que tenga que afrontar unos intereses contrapuestos entre empresas grandes y pequeñas. Eso me tocó vivirlo en Proespacio. Y si tuviera el mismo resultado que tuve allí sería fantástico, pues acabamos incorporando a todas las empresas.
Si le eligen presidente, ¿Cuál serán las primeras acciones que llevará a cabo más allá de las internas de la asociación? ¿Qué urgencias detecta en el sector?
Haremos una agenda de contactos con los primeros responsables de la Administración en los dos ministerios que más nos afectan, el de Industria, Turismo y Agenda Digital, y el de Economía. Intervendremos en todo lo que es agenda digital como interlocutores, y en lo que tenga que ver con industria e innovación, defendiendo los intereses del sector. En concreto, queremos que se incorpore como un gran objetivo de la agenda la creación de puestos de trabajo y de empresas que los generen, como se ha hecho en la Agenda Digital alemana. Y para ello queremos que el Ministerio de Industria y el de Empleo lo establezcan como una prioridad. Es nuestra obligación social como empresarios fomentar este tipo de empleo y colaborar en todo lo que favorezca que esto ocurra y anticipar las necesidades. Por ejemplo, acabamos de firmar un convenio con el departamento de Educación de la Generalitat de Cataluña para colaborar con ellos en la generación de vocaciones de ciencia, tecnología e ingeniería desde las escuelas y la formación profesional, hasta con la recualificación de titulados universitarios de otras áreas. Como apuntaba el otro día en un artículo Manuel Castells, es el momento de aplicar el keynesianismo del siglo XXI. El del siglo XX era hacer carreteras y obra civil, el del XXI es invertir en enseñanza, en conocimiento, en innovación. Y ahí vamos a estar proponiendo, aportando e impulsando iniciativas.
Otro de nuestros objetivos será establecer una relación más estrecha con sectores que utilizan cada vez más nuestras tecnologías, especialmente el del automóvil o el de la industria 4.0, porque estos verticales se están convirtiendo en grandísimos aceleradores de la innovación.