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Telecomunicaciones

El capital riesgo analiza las posibles ofertas por Telxius

El mercado está pendiente de las desinversiones de Telefónica

Torres de telefonía móvil.
Torres de telefonía móvil. Pablo Monge
Santiago Millán Alonso

Los inversores están centrando sus miradas en los próximos pasos de Telefónica en su estrategia de desinversiones. La operadora, que presentará sus resultados de 2016 el 23 de febrero, parece haber empezado a dar pasos para la venta de parte del capital de Telxius, su filial de infraestructuras que engloba torres de telefonía móvil y cables submarinos.

En el mercado ya empiezan a barajarse nombres de posibles interesados del área del capital riesgo. El último ha sido GIC, el fondo de inversiones soberano de Singapur, según el diario británico The Times. Esta firma está trabajando con el grupo CVC para presentar una oferta para comprar una participación que estaría valorada en cerca de 1.500 millones de euros. La filial de Telefónica estaría valorada en el entorno de los 3.200 millones de libras (unos 3.700 millones de euros). Entre los grupos interesados también figuraría Ardian.

Ahora bien, fuentes del mercado no descartan la venta parte de los activos de Telxius por separado, especialmente las torres de telefonía móvil, a algún grupo industrial. El apetito inversor por estos activos por parte de grupos como Cellnex o American Tower se mantiene. El gigante estadounidense y el fondo de pensiones holandés PGGM alcanzaron un acuerdo en diciembre para comprar la empresa francesa FPS Towers, propietaria de más de 2.400 emplazamientos de telefonía en Francia, por 697 millones de euros. Fuentes del sector destacan que American Tower podría buscar nuevas operaciones para crecer en Europa. A su vez, Cellnex cerró hace pocos días una emisión de deuda de 335 millones de euros para reforzar la liquidez de cara a afrontar posibles operaciones corporativas en 2017.

Una vez cerrado el acuerdo de Telxius, Telefónica volvería a activar la OPV o venta de O2, su filial británica, paralizada por la volatilidad de los mercados como consecuencia del brexit y de las elecciones en EE UU. Telefónica trataría de aprovechar la buena situación de la Bolsa británica. De hecho, el FTSE 100 ha marcado máximos históricos en este mes de enero. La teleco estableció el pasado verano un equipo directivo en O2 de perfil financiero, encabezado por Mark Evans, hasta entonces director financiero.

El objetivo de Telefónica pasaría por reducir deuda, situada en 49.984 millones de euros a final de septiembre. La operadora decidió reducir el dividendo para afrontar un recorte del endeudamiento de forma orgánica. Con este movimiento, la teleco venía a dejar claro que no tenía ninguna prisa en la venta de activos. De hecho, Telefónica paralizó la colocación en Bolsa de Telxius en septiembre por la baja valoración de la empresa, derivada de las órdenes de compra recibidas.

En la política de desinversiones de activos no estratégicos, Telefónica alcanzó un acuerdo a final de 2016 para la venta del canal argentino Telefe, por un importe de 345 millones de dólares (unos 322 millones de euros). La teleco precisó que obtendría unas plusvalías cercanas a 205 millones.

La teleco adjudica un nuevo contrato a Huawei

Telefónica y Huawei amplían sus relaciones. La operadora española ha adjudicado al fabricante chino Huawei de equipos de telecomunicaciones la construcción de una red virtual EPC (Evolved Packet Core) a gran escala, que ofrece un marco para ofrecer voz y datos convergentes en las redes de telefonía móvil 4G. Ninguno de los socios precisó el importe del contrato.

En un comunicado, ambos socios explicaron que esta infraestructura de vEPC abarcará 11 países de Latinoamérica (Argentina, Brasil, Colombia, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, México, Nicaragua, Perú, Panamá y Uruguay) y dos en Europa (Alemania y España).

La teleco señaló también que la evolución de la red de telefonía móvil tiene que hacer frente al crecimiento del tráfico, por lo que ha decidido utilizar las tecnologías de virtualización para obtener flexibilidad, ya que permiten adaptarse al entorno cambiante mientras se trabaja en la optimización y en el logro de eficiencias.

Según Telefónica, la solución CloudEPC de Huawei permite construir redes ágiles que se ajustan rápidamente a las demandas de nuevos servicios, reducen los costes de producción, soporta una implementación más rápida de los servicios y asigna dinámicamente recursos virtuales, al mismo tiempo que ofrece disponibilidad, seguridad y fiabilidad y permite la integración con las redes legadas de la compañía.

El despliegue de vEPC permite atender diversos casos de uso que incluyen servicios tradicionales centrados en el cliente, así como áreas de crecimiento futuro como el internet de las cosas y las líneas móviles entre máquinas (M2M), los operadores móviles virtuales, redes de LTE privadas y la computación en el borde móvil (Mobile-Edge Computing).

Sobre la firma

Santiago Millán Alonso
Es periodista de la sección de Empresas, especializado en Telecomunicaciones y Tecnología. Ha trabajado, a lo largo de su carrera, en medios de comunicación como El Economista, El Boletín y Cinco Días.

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