Una empresa catalana de ingeniería se interesa por Blanco
La sociedad Grupo Hipaldisa se ha puesto en contacto con el administrador concursal de la firma textil
Los primeros 779 trabajadores de Blanco, en pleno proceso de liquidación, en ser despedidos saldrán de la empresa el próximo 31 de enero. Sin embargo, a última hora, ha surgido un interesado por la marca textil que en su día fuera una de las más importantes de España.
Se trata de la empresa de ingeniería catalana Grupo Hipaldisa. El administrador único de la compañía, con sede en la provincia de Barcelona, Jordi Hidalgo, asegura que se ha puesto en contacto, a través de correo electrónico con el administrador concursal de la compañía, aunque todavía no ha recibido respuesta.
Grupo Hipaldisa SL es una sociedad creada en 2016 con un objeto social de “construcción de redes eléctricas y de telecomunicaciones”, según figura en el Registro Mercantil.
No se trata de la primera aventura empresarial de Hidalgo. Según figura en el citado registro, ha sido administrador único de otras tres sociedades, todas ellas extintas. La última de ellas, Calfos Tecnología del Agua, S.L., fue liquidada tras presentar concurso voluntario de acreedores en 2012. Ninguna de las empresas creadas por Hidalgo han tenido un objeto social ligado a la moda y asegura que su interés por Blanco se produce por la “admiración” que tiene hacia el fundador de la compañía, Bernardo Blanco.
Mientras tanto, la empresa aborda en las próximas semanas el despido de sus 850 empleados. La compañía dará salida a final de este mes al grueso, 779 empleados, mientras que otros 21 saldrán el 15 de febrero, 10 más el 28 del mismo mes, y el 30 de abril los ocho restantes.
Fuentes sindicales señalaron a Europa Press que, en el peor de los casos, tendrá que ser el Fondo de Garantía Salarial (Fogasa), el que se haga cargo de las indemnizaciones y los salarios adeudados. Sin embargo, precisaron que la idea es que según se vayan vendiendo las tiendas, se irán amortizando las deudas con los empleados. El juez ya dio luz verde al proceso de liquidación el pasado diciembre de la empresa, que tiene un pasivo de 133 millones.