BP cae en Bolsa tras incumplir previsiones
BP ha anunciado hoy una caída del 45% en el beneficio neto del segundo trimestre, lo que le llevará a recortar sus inversiones para lo que queda de ejercicio por debajo de los 17.000 millones previamente manejado. La sobreoferta de crudo del crudo y los costes como las indemnizaciones por los vertidos en el Golfo de Mexico y la menor contribución de Rosneft han lastrado los resultados.
La parte buena de la cuenta de resultados es que la petrolera ha logrado recortar en un 75,6% las pérdidas hasta 1.419 millones de dólares (1.290 millones de euros). En los seis primeros meses de 2016, la compañía registró pérdidas por importe neto atribuido de 2.002 millones de dólares (1.820 millones de euros), una 37,8% menos que un año antes.
La compañía ha anunciado un beneficio subyacente del coste de reemplazo, el indicador de rendimiento favorito de los analistas, cayó hasta 720 millones, desde los 1.300 millones del mismo periodo del ejercicio anterior. Esta cifra está unos 120 millones por debajo de lo esperado por los analistas.
La facturación de BP en el primer semestre del ejercicio alcanzó un total de 86.442 millones de dólares (78.583 millones de euros), un 27,6% menos.
A 30 de junio, la deuda de la compañía británica alcanzaba un total de 30.900 millones de dólares (28.090 millones de euros), un 24,6% por encima de la cifra registrada un año antes.
“Esperamos que el entorno externo siga siendo complicado, aunque contamos con una sólida cartera de nuevos proyectos que añadirán a finales de año una capacidad de producción equivalente a medio millón de barriles de petróleo al día”, declaró Bob Dudley, consejero delegado de BP. A pesar de todo, la compañía mantendrá el dividendo de 10 céntimos por acción, a diferencia de lo llevado a cabo, por ejemplo, por la española Repsol.
Las cuentas de la petrolera británica reflejan un impacto negativo de 5.200 millones de dólares (4.727 millones de euros) por cargas brutas no operativas relacionadas con el desastre causado en el Golfo de México por la plataforma Deepwater Horizon.