La presión de la banca aleja al Ibex de las subidas en toda Europa
El pesimismo procedente de Japón y los resultados han lastrado a los parqués en Europa. Pese a que todos se han recuperado tras la apertura de Wall Street, el Ibex ha acabado en negativo.
Las próximas citas con los bancos centrales continúan acaparando la atención de los inversores, que han vuelto hoy a mostrarse cautos a la espera de lo que las instituciones monetarias de EEUU y de Japón decidan hacer en los encuentros que están teniendo lugar esta semana. Aunque el desconcierto ha reinado durante toda la sesión, en la que los índices han bailado entre las ganancias y las pérdidas, finalmente los parqués europeos han logrado resistir la presión gracias a Wall Street, que tras una apertura alcista, ha acabado contagiando el optimismo a las Bolsas del Viejo Continente.
Sin embargo, no todos los parqués han brillado con el mismo color, ya que los inversores han vuelto a deshacer posiciones en el Ibex, que ha acabado sumido en las pérdidas. El selectivo, que ha cerrado con una caída del 0,18%, hasta los 8.560,2 puntos, sigue siendo incapaz de alcanzar los 8.600 puntos. Los culpables, en esta ocasión, han vuelto a ser los bancos, que se han contagiado por el pesimismo de otras entidades europeas que han presentado resultados poco atractivos para el mercado. Ello, unido al signo negativo procedente de Japón debido a la decepción de sus inversores ante el paquete de estímulos que se prevé que el Gobierno del país ponga en marcha el próximo viernes, han contribuido al signo negativo del parqué español. Entre las entidades que han ejercido más presión han destacado como Popular (-3,7%), Bankia (-2,46%), BBVA (-0,85%) o CaixaBank (-0,54%),
En el resto del Viejo Continente, la sesión ha transcurrido de manera más optimista a la del selectivo español. Los principales índices europeos, que han comenzado la jornada sumidos en las pérdidas, han acabado dándose la vuelta a media sesión rendidos ante la apertura del todopoderoso Wall Street. Así, El Footsie británico se ha anotado un 0,3%, el Cac francés ha avanzado un 0,1%, el Dax alemán ha sumado un 0,5 % y el Mib italiano se ha revalorizado un 0,1%. Todo ello después de que compañías como la petrolera BP, en Londres, o la entidad Commerzbank, en Alemania, presentaran unos resultados por debajo de las previsiones de los analistas y lastraran a los sectores a los que pertenecen en Europa.
Al otro lado del Atlántico, los índices estadounidenses han abierto con signo optimista a la espera de la decisión de Janet Yellen. La representante de la Reserva Federal, que se encuentra presidiendo la reunión de dos días de dicha institución que concluirá mañana, podría hacer que los mercados giraran a uno u otro lado si decide subir el precio el dinero en EEUU. Aunque no se esperan cambios en su política monetaria, al cierre de la sesión en Europa, los índices se han dado la vuelta hasta cotizar en negativo. Así, el Dow Jones ha caído un 0,43%, el S&P ha cedido un 0,32% y el Nasdaq se ha dejado un 0,07%. A estas caídas ha contribuido el petróleo que, por cuarta jornada consecutiva, ha acabado cediendo un 0,25%, hasta los 44,61 dólares debido a la sobreoferta que sigue habiendo en el mercado, incluso después de que los inventarios lleven semanas cayendo.
En el mercado de deuda, la estabilidad ha seguido estando presente. La prima de riesgo ha caído hasta los 114 puntos básicos, uno menos respecto a la jornada anterior. Por su parte, el interés de la deuda española a 10 años ha escalado ligeramente hasta el 1,118% después de haber estado cotizando durante dos sesiones en mínimos históricos.