“No estamos ante una crisis global, sino sectorial”
El pesimismo que impera en los mercados desde comienzos de año no responde a principios racionales. Esa es la idea que defiende Steven Andrew, responsable del fondoM&G Allocation Fund. El gestor se muestra convencido de que en la actualidad el mundo no atraviesa una situación de recesión global sino una crisis sectorial. Andrew cree que predecir el comportamiento de los inversores es una tarea muy arriesgada y más en un momento de fuerte volatilidad como el actual. Su planteamiento pasa por el análisis de lo acontecido con el objetivo de poder esquivar los riesgos.
¿En qué consiste la estrategia de inversión que dirige?
El equipo del que formo parte se centra en las oportunidades del mercado, que no responden a razones de fundamento económico. Cada vez más, cobra protagonismo la inversión emocional. Es decir, aquella que tiene su origen en los cambios de comportamientos y creencias. El objetivo de esta estrategia no son las ganancias a corto plazo, sino a largo plazo con el propósito de preservar el dinero.
A la hora de apostar por la renta variable, ¿qué prefiere, el mercado europeo o el estadounidense?
Si tengo que elegir entre el mercado americano y el europeo me quedo con el segundo por cuestiones de valoración. Aunque la economía de EE UU sigue dando muestras de su fortaleza –continúa creando empleo y el sector inmobiliario mantiene su expansión– la Bolsa del Viejo Continente está mucho más barata.
El alza de tipos, sin efecto en la economía
Las dudas sobre el crecimiento global, y en especial de Estados Unidos, han enfriado las expectativas de los inversores sobre el proceso de normalización de la política monetaria. Después de que en diciembre la Reserva Federal anunciara la primera subida de tipos desde julio de 2006, ahora son pocos los que se atreven a anticipar nuevas alzas. Esto contrasta con las estimaciones de hace apenas seis meses. Las buenas perspectivas económicas que se manejaban a finales de 2015 hacían prever entre tres y cuatro repuntes para este año. “Pero la situación se ha dado la vuelta”, afirma Steven Andrew. A pesar de que en el horizonte no se contemplan nuevos ascensos del precio del dinero, el experto señala que el “escenario de fondo no ha cambiado”. “Las subidas de los tipos no tienen impacto en la economía real. El empleo continúa su expansión al igual que el mercado inmobiliario”.
Donde sí que ha tenido repercusión el fin de la era de tipos cero ha sido en la banca. “El sector financiero de Estados Unidos se ha estresado” y es por ello que Andrew recomienda no tomar posiciones en estas firmas.
Respecto a la política monetaria de la zona euro, el experto señala que “en los últimos cinco años el BCE ha sufrido una profunda transformación” y aunque “intenta responder a la ansiedad del mercado, este cada vez pide más, pero los efectos de las medidas son menores”.
¿Cuáles son sus sectores preferidos en el mercado europeo?
A pesar de las dudas que existen en los últimos tiempos, la economía europea ha experimentado una profunda transformación. En especial países como España, que se sitúan a la cabeza de la recuperación de la región. En este entorno cíclico, las firmas que más nos gustan son aquellas que están orientadas al consumo doméstico, como por ejemplo las firmas energéticas.
En los primeros meses del año, el mercado ha asistido a una tendencia bajista que ha vuelto a disparar los temores de recesión. ¿Se espera una recuperación para los próximos meses?
No se puede predecir el futuro.Ante esta limitación, lo que nos queda es analizar lo ocurrido y tratar de buscar las consecuencias. Desde comienzos de año se ha extendido una visión bastante pesimista entre los inversores, que no se corresponde con la realidad.El problema de esta visión negativa es que se confunde la volatilidad con el riesgo. Mientras que la primera no se puede manejar, el riesgo, sí.
Hablando de riesgos, ¿cuáles son las principales amenazas a las que se enfrentan los mercados? ¿Estamos ante las puertas de una nueva recesión?
A las dudas que persisten sobre la economía China, en los últimos meses se han sumado los rumores sobre un posible impago de los créditos por parte de las compañías energéticas, fruto de la caída del precio del crudo.El default de estas empresas supondría un riesgo para el sector bancario que se ha llegado a comparar con el vivido por la crisis del inmobiliario en 2007. Sin embargo, sus magnitudes no son comparables. Lo que existe en la actualidad no es una recesión global, sino una crisis sectorial.
La situación política española centra la atención de los medios. ¿Cree que es un riesgo para el futuro?
El panorama político español sigue la tendencia europea y es un reflejo del descontento social. De la experiencia de Grecia se extrae la conclusión de que el cambio de orientación política no ha supuesto una solución, sino que ha llevado al colapso. No obstante, aunque el foco se ponga ahora en España, la incertidumbre política se extiende a países como Italia, Portugal, Reino Unido e incluso Estados Unidos.
Desde mediados de 2014 el crudo está sumido en una espiral bajista. ¿Ha tocado suelo?
Es difícil establecer un precio para el oro negro, que es de esperar que continúe en niveles muy bajos. Esto, en principio, debería interpretarse como una buena noticia para las economías.
¿Se alcanzará la igualdad entre el euro y el dólar este año?
En un escenario de tipos de interés al alza en Estados Unidos y de crecimiento de su economía, combinado con unos tipos congelados en Europa es de esperar que el dólar se mantenga fuerte. Lo que no es tan sencillo es determinar si este año se conseguirá la igualdad entre ambas divisas.