Un icono para el barrio más ‘techie’ de Madrid
La zona de Julian Camarillo estrenará edificio de 36.000 metros cuadrados, destinados a una gran empresa y que puede acoger alrededor de 3.500 empleados
Madrid tendrá un nuevo gran edificio en la zona de Julián Camarillo, un área de la capital donde se están concentrando empresas punteras o las divisiones de tecnología de grandes empresas. “El barrio se está convirtiendo en algo similar al Distrito 22@ de Barcelona, con compañías innovadoras”, señala José Miguel Setién, director de oficinas de la consultora JLL. A ese cambio se sumará ahora el mayor imán para atraer una gran firma.
El nuevo edificio, en la calle Julián Camarillo número 31, está desarrollado por la promotora Torre Rioja, dirigida por el empresario Ángel Soria. El inmueble, que se encuentra actualmente en las fases iniciales de la obra, tendrá 36.000 metros cuadrados en seis plantas prácticamente diáfanas de 8.000 metros cuadrados. Se prevé que la propiedad acoja alrededor de 3.500 empleados.
Por la tipología de la zona, donde hay que mantener una altura limitada, el edificio mantendrá esa altura de seis plantas, pero será una de las grandes propiedades del área. De hecho, comparándolo con grandes rascacielos como por ejemplo la Torre del BBVA en Castellana 81, solo cuenta con 2.000 metros cuadrados menos.
Actualmente Torre Rioja ha comenzado las fases iniciales de la obra mientras busca una empresa que quiera mudarse allí. Ese proceso de comercialización lo ha dejado en manos de JLL y previsiblemente algún otro agente. “Buscamos un inquilino de gran tamaño”, reconoce Setién. Además, el diseño se puede ir modificando parcialmente según las necesidades del futuro ocupante. Incluso los plazos para arrancar la construcción definitiva, con una cifra de inversión no desvelada, se adaptarán a la empresa. En cualquier caso, la promotora prevé que en dos años está finalizado. Además, contará con zona comercial, más de 1.000 plazas de parking y zonas de servicios. “El proyecto cuenta con unas calidades excelentes. Prevé estar a primer nivel”, cuenta Setién.
El responsable de JLL cree que esta propiedad en el área de Julián Camarillo interesará fundamentalmente a compañías de tecnología, ingeniería, de telecomunicaciones o las divisiones de backoffice de grandes empresas y banca.
El polígono de Julián Camarillo se desarrolló entre la década de 1950 y 1970 como base para empresas industriales. Poco a poco, la transformación de la economía hizo que se cerraran algunas de ellas o que se trasladaran a otras zonas. En ese área tenían planta la aeronáutica CASA o Enasa. Todavía quedan factorías, como la de Laboratorios Rovi, la farmacéutica ALK-Abelló y de la alemana Bosch. Pero poco a poco se ha ido transformando un área de oficinas, e incluso residencial. En este área se encuentran algunas divisiones de firmas como IBM, Tecnocom, Atos, la alemana ABB, la ingeniería Eptisa o la Universidad Alfonso X el Sabio.
Torre Rioja ha protagonizado como casero, en los últimos meses, la rehabilitación de dos grandes edificios en la zona colindante de la autovía A-2. La aseguradora Axa se desplazará a un inmueble de 23.600 m2 y el banco BNP lo hará también a uno colindante de 20.000 m2, propiedad de la inmobiliaria, y que anteriormente ocupaba la división de I+D de Telefónica. Por su parte, la inmobiliaria, donde Soria ejerce como consejero delegado, ha ido perdiendo cifra de negocio en los últimos años, desde los 27,8 millones de euros en 2010, frente a los 18,7 millones en 2014 (las últimas cuentas presentadas en el registro).
El principal inconveniente con el que se encuentra la promotora en esta operación para atraer a un gran inquilino es precisamente la zona, ya que se encuentra relativamente alejada del centro de la capital y diseñada como un polígono industrial, sin los servicios que el centro puede ofrecer. Entre sus ventajas, que los alquileres que pagan las compañías son considerablemente más bajos. Si en el entorno de la Castellana las rentas de los mejores edificios pueden llegar a más de 25 euros mensuales por metro cuadrado, en ese polígono pueden estar por debajo de los 10 euros.