Moody’s rebaja la perspectiva de España a estable
Moody's ha decidido rebajar la perspectiva de a economía española desde positiva a estable ante la incertidumbre política. No obstante, mantiene sin cambios es la nota que permanece en Baa2 desde el 21 de febrero de 2014, última fecha en la que mejoró el rating. En el comunicado remitido por las agencia, la firma aplaudía las mejoras institucionales adoptadas por el Gobierno español en los últimos años, incluyendo un mayor control sobre las finanzas regionales y la mejora de las pensiones, pero considera que su impacto ha sido menor al esperado por la agencia en 2014. "Este resultado menos favorable limita el potencial para la mejora del crecimiento", afirma.
Asimismo, Moody 's espera que el Ejecutivo informe de un déficit por encima del objetivo marcado por Bruselas este año y los próximos, evitando cualquier reducción significativa en el peso de la deuda. La firma cree que las reformas estructurales adiciones que contribuirían al crecimiento no se lograra en los próximos tres o cuatro años, independientemente la composición del próximo Ejecutivo, cuyas negociaciones continúan dominando el panorama.
La agencia de calificación crediticia ha mantenido este viernes sin cambios el 'rating' de la economía española, que seguirá en el escalón 'Baa2' (suficiente medio) y repite así la maniobra de hace cuatro meses cuando decidió no tocar la nota de España a la espera de conocer el resultado de 20D.
Hace tres semana Fitch reafirmó su visión sobre la economía española, manteniendo el rating de la deuda soberana en aprobado con perspectiva estable (BBB+). En sus consideraciones, Fitch señaló que las dudas sobre el panorama político no hará “descarrilar” el crecimiento económico y que Cataluña seguirá perteneciendo a España.
En su revisión de la nota española, la agencia consideró que tanto el país como la eurozona lograrán evitar una deflación duradera, con ayuda, entre otros, del programa de compra de activos del Banco Central Europeo (BCE), si bien el riesgo de deflación podría intensificarse en caso de nuevos “shock” económicos, alertan.
El octubre del año pasado Standard & Poor's (S&P elevó un peldaño el rating de la deuda soberana, que pasó de BBB a BBB+ con perspectiva estable. La agencia justificó su decisión en las reformas laborales aprobadas en 2010 por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero y dos años después por el Ejecutivo de Mariano Rajoy, que han contribuido a una mejora de la competividad.
Poco después DBRS confirmó la nota de solvencia a largo plazo de España en 'A bajo' y mejoró la tendencia de 'estable' a 'positiva', debido al fortalecimiento de la recuperación, que compensa el aumento de la incertidumbre política en el país.