Soria baja un 6,7% el ‘euskopeaje’ eléctrico y congela los demás

La luz para la tarifa más habitual baja el 1,2% Los pagos por capacidad se recortan un 21%, pero pueden subir a lo largo de 2016

A. M.

Los consumidores eléctricos verán congelados los peajes de acceso a las redes en 2016, excepto la industria vasca y navarra, a la que se les rebaja un 6,7%. El euskopeaje, que se aplica desde el pasado enero ya se vio beneficiada con un descuento del 12% este año.

El Gobierno ha congelado por segundo año consecutivos los peajes eléctricos en todas sus modalidades, excepto una: la tarifa 6.1B, que baja un 6,7% en todos los periodos horarios, lo que se suma al 12% de bajada del pasado enero. Esta tarifa es la que se aplica a tensiones de entre 30 y 36 kV, lo que favorece a la industria del País Vasco y Navarra. La denominada euskopeaje eléctrica se creó en septiembre de 2014, para lo cual, Industria modificó la metodología de reparto de los costes de las redes en los peajes elaborada por la CNMC, lo que le valió el primer conflicto con este organismo.

La medida, que supuso la ruptura de los peajes únicos en todo el Estado, se tradujo automáticamente en una rebaja de los peajes de acceso de la industria con una potencia entre 30 y 36 kV, según el acuerdo al que habían llegado el Gobierno con el PNV por su apoyo en la aprobación de la Ley Eléctrica en diciembre de 2013. Una gran mayoría de empresas del País Vasco cuentan con una potencia contratada de 33 kV (la que permite las redes de Iberdrola). A la vista de que la CNMC mantuvo en su metodología la clasificación de tensiones (entre 36 kV y 220 kV, se consideraba alta tensión; entre 1 kV y 36 kV, media tensión y por debajo de 1 kV, baja), y, como a mayor tensión menor tarifa, Industria decidió fijar la alta a partir de 30 kV, beneficiando así  a las empresas de esos territorios.

La luz baja un 1,2%

Según la propuesta de orden de peajes que entrarán en vigor en enero, las tarifas de acceso se congelan, salvo la antes citada, pero se reducen los precios unitarios que pagan los consumidores para financiar los pagos por capacidad en un 21% respecto a los vigentes a 31 de diciembre de 2015 y un 41,5% respecto a los precios medios de todo este año. En volumen, 517 millones menos para unos incentivos que se destinan a los ciclos combinados (por disponibilidad y por la inversión realizada) y las centrales de carbón que se desnitrifiquen. Estas recibirán 730 millones por un concepto que en 2015 ha llegado a los 1.247 millones y que se aplica en el precio de la energía y no en los peajes.

Un recorte importante por un año que permite al Gobierno bajar ahora la factura de la luz, pero que, de ser excesivo, podrá revisar. Así, señala la orden, “ese periodo podrá adaptarse según el desarrollo de los mecanismos de capacidad”. Para ello, se estiman 100 millones de euros adicionales como coste asociado a dicho mecanismo.

De un análisis detallado del texto que comenzó a circular el martes, se desprende que para la tarifa más habitual (la 2.0A), el precio de la energía en el PVPC (al que tienen derecho los pequeños consumidores) baja un 4,3% respecto al precio medio de todo 2015 y tan solo un 1,2% en enero de 2016 respecto a diciembre de 2015, teniendo en cuenta que el precio en el segundo semestre es superior a la media del año, pues en agosto ya se redujeron los pagos por capacidad.

El sistema eléctrico acabará el próximo año con un superávit de tarifa de 24 millones de euros, que se sumarán a los 364 millones estimados para este ejercicio y los 640 millones que, según la liquidación definitiva de la CNMC, que se registraron en 2014. Aunque la Ley Eléctrica obliga a que estos excedentes se destinen a amortizar la deuda eléctrica acumulada en el pasado (unos 26.000 millones de euros), el mecanismo de amortización aún no está regulado. La propia orden de peajes recuerda que hasta que no se produzca dicho desarrollo reglamentario, los superávits “no podrán destinarse a otro fin”.