6 claves para elegir la mejor tarjeta de crédito
En España hay 67,48 millones de tarjetas en circulación según los datos del primer trimestre publicados por el Banco de España. Son 67,48 millones de medios de pago con los que se han producido durante este periodo 610.864 operaciones de compra en puntos de venta por un importe de 25.203,69 millones de euros, lo que supone un incremento del 5,42% respecto al año anterior.
El medio de pago cada más utilizado a lo largo y ancho del mundo y que incluso se podría convertir en el medio de pago principal en Dinamarca, ya que el Gobierno de este país ha lanzado una propuesta para prescindir de dinero en efectivo para determinados comercios –ropa, restaurantes y gasolineras- con el objetivo de ahorrar costes financieros y administrativos en un país en el que los pagos electrónicos están a la orden del día –esta medida también ayudaría a luchar contra la economía sumergida-.
La tarjeta, una herramienta útil que aporta amplias posibilidades y nos puede salvar de más de un aprieto. En el caso de las tarjetas de crédito, hay que utilizarlas con cautela y conociendo bien sus condiciones de pago. En España, de las 67,48 millones de tarjetas en circulación, 43,09 millones son tarjetas de crédito, lo que demuestra que es un medio de pago muy presente en España, más que la tarjeta de débito.
¿A qué prestar atención?
1. Forma de pago. Las entidades dan la posibilidad de elegir entre pago único –todo el dinero que ha sido utilizado a lo largo del mes se abona a final del mismo o al mes siguiente-o pago aplazado –pagando un porcentaje sobre el dinero gastado o con una cantidad fija cada mes-.
2. Interés. Quizá uno de los puntos que más interesa a la mayoría. Además de ser un medio de pago también son una vía de financiación. Disponer de dinero a crédito no resulta algo gratuito, evidentemente hay que pagar un interés por ese dinero que la entidad adelanta para tus compras y cuyo pago se aplaza. Es la entidad financiera la que establece el tipo de interés, éste suele ser fijo –aunque puede ser modificado informando previamente al titular con dos meses de antelación- y es frecuente que se encuentre entre el 12% y el 29% TAE. Es importante saber que el tipo de interés debe aparecer en el contrato de la tarjeta y habrá que asegurarse de en qué términos está expresado, si en términos mensuales o anuales. Además desde el Banco de España indican que en el contrato de la tarjeta de crédito pueden aparecer otros dos tipos de intereses: el tipo de los saldos excedidos –“se aplica cuando usted ha sobrepasado el límite de crédito”- y el tipo de interés de demora –“cuando usted deja de pagar al no haber saldo suficiente en la cuenta en la que debe hacerse el cargo”-, además en este caso se produce una comisión por reclamación que también deberá estar recogida en el contrato.
3. Cuota anual. Son muchas las entidades que apuestan por la gratuidad de las tarjetas de crédito año tras año, es decir, que la emisión y renovación de la tarjeta no suponga un coste para el titular. Pero hay otras entidades que contemplan la cuota anual desde el primer momento o bien que durante el primer año sea gratuita los siguientes no. Según el estudio Comisiones Bancarias elaborado por Facua la cuota anual de una tarjeta de crédito en una cuenta sin nómina es de 33,81 euros de media, mientras que cuando se tienen los ingresos domiciliados el coste anual desciende a los 16,19 euros de media.
4. Seguros. Es un punto que muchos titulares desconocen. Las tarjetas de crédito a menudo llevan asociados seguros gratuitos y de los que se puede hacer uso en caso de producirse alguna situación que éste cubra. Son habituales los seguros de protección de compras, de robos, antifraudes, de viajes, de asistencia o incluso algunas tarjetas incluyen seguro de accidentes. Es muy importante ser conocedores de la existencia o no de estas coberturas.
5. Descuentos. Otro punto a tener en cuenta y que se convierte en una gran ventaja en el momento de utilizarlas. Es frecuente que las tarjetas de crédito ofrezcan descuentos en determinados establecimientos o bien devolución de un porcentaje de las compras realizadas. Es habitual encontrar descuentos al utilizar la tarjeta de crédito en estaciones de servicio. Los descuentos o devolución de compra suelen ser de entre el 1% y el 3%.
6. Sin cambiar de banco. Hay tarjetas de crédito con las que no es necesario cambiar de banco. El funcionamiento se basa en que la entidad financiera emite la tarjeta y el titular elige en qué cuenta asociar los pagos. Una opción cómoda que evita cambios y papeleos.