“Atos saldrá de la crisis como un consolidador de la industria”
Atos completó el pasado 1 de julio la adquisición de Xerox ITO por 966 millones de dólares (872 millones de euros). Una operación clave para la consultora tecnológica francesa que logra con este movimiento un hito para la compañía: convertir a EEUUen su mayor mercado por volumen de negocio. La empresa, con 30 años de actividad en España, lleva años creciendo a golpe de talonario, y asegura seguir abierta a nuevas adquisiciones. “Atos saldrá de la crisis como uno de los consolidadores de esta industria”, asegura Iván Lozano, director general de Atos Iberia, que admite, no obstante, que cuando una empresa crece mucho como la suya a base de adquisiciones “la marca sufre un poco”.
La multinacional ha logrado en siete años pasar, vía compras, de ser un jugador europeo mediano a ser un referente global en consultoría tecnológica, según defiende el directivo. “Hemos predicado con el ejemplo. Nos hemos reforzado con adquisiciones estratégicas [la división de servicios informáticos de Siemens, Bull y ahora la unidad de servicios tecnológicos alrededor de las infraestructuras de Xerox] para poder ser una alternativa a los gigantes no europeos. Hoy tenemos empresas por encima, pero ninguna europea”, continúa Lorenzo, que advierte que Atos tiene ya una capacidad de facturar 11.000 millones de euros al año (con la última compra), lo cual les coloca en quinta posición en el ranking mundial, solo por detrás de IBM, HP, CSC y Fujitsu, según Gartner.
“Ya no somos una colección de franquicias como en 2008. Somos una firma global capaz de dar el mismo portfolio en todo el mundo”
El ejecutivo asegura que esta industria está en plena tendencia globalizadora y habrá más consolidación. “Habrá menos jugadores, pero más potentes, y nosotros seguiremos participando en este proceso, haciendo en paralelo de la deuda cero y de la generación de flujo de caja una religión”. ¿Cuál será su próxima compra? Lozano no desvela nombres, pero sí recuerda que cuando compraron Xerox dejaron claro que esta operación era el primer paso de lo que entendían que había que hacer en Norteamérica, “así que seguramente los pasos vendrá por ahí”.
Según Lozano, esta concentración va ligada al proceso de transformación digital de la economía, que es imparable. “Solo los partners tecnológicos con capacidad financiera suficiente estarán en disposición de ofrecer el rango de servicios que necesitan las compañías para migrar sus infraestructuras y servicios a la nube”. Eso no quiere decir, añade, que las empresas nicho vayan a desaparecer. “Como en todo ecosistema las habrá; son muy ágiles y con estructuras de coste muy optimizadas. Pero no vemos que vayan a quedar todas las consultoras medianas que hay hoy”.
Frente a lo que está ocurriendo en otros negocios tecnológicos, en consultoría Lozano no ve, por ahora, amenazas importantes de rivales asiáticos. “Aún les falta una parte clave de la cadena de valor: el know how de los procesos de negocio. Hay gigantes asiáticos con grandes capacidades en desarrollo de software, donde son muy eficientes. Pero estas firmas aún preguntan a sus clientes qué quieren que les hagan, cuando los clientes lo que reclaman es qué podemos hacer por ellos, porque ahí está el valor”. “Quiero ser prudente, pero mientras mantengamos el conocimiento de los procesos core de los negocios de nuestros clientes, tendremos ventaja”.
Plan estratégico
En este contexto de competencia, Atos se ha reforzado y ha dado un giro de 360 grados desde finales de 2008 cuando, tras un periodo de fuerte inestabilidad accionarial, se nombró presidente ejecutivo de la firma a Thierry Breton, ex consejero delegado de France Télécom y ministro de Economía, Hacienda e Industria del Gobierno de Jacques Chirac. “Él determinó que Atos no tenía un rendimiento financiero adecuado (estaba por debajo de la media de su industria) y que no éramos una empresa global. Entonces éramos una colección de franquicias; en cada geografía teníamos una estrategia, un portfolio... Breton puso en marcha un gran plan de transformación que nos ha permitido ser una organización más eficiente y global, capaz de vender el mismo portfolio en todo el mundo. Somos 96.000 empleados (contando Xerox), unos 6.000 en España, y somos capaces de acompañar a un cliente entregándole el servicio de forma global, con las mismas buenas prácticas y las mismas herramientas”.
En España, muchas empresas han aumentado sus inversiones en TI, pero siguen presionando en las tarifas”
Para Lozano, la tres compras resultan estratégicas y refuerza el futuro de Atos. “Con la operación de Siemens, esta se convirtió en nuestro accionista de referencia y también en nuestro cliente más importante en volumen”, porque se hicieron cargo de la gestión de sus infraestructuras de TI y de sus aplicaciones. Además, ambas firmas se comprometieron a invertir una cantidad de dinero en el desarrollo de soluciones innovadoras en industrias clave para ambas. “En el primer trienio fueron 50 millones cada una, y en el periodo actual, que llega hasta 2016, son 75 millones. Este año hemos puesto el foco en soluciones de big data y data analytics para el sector industrial”. En cuanto a Bull, Lozano destaca la enorme cantidad de patentes que esta empresa tenía en las áreas de seguridad y big data, “lo que nos ha permitido acelerar nuestra posición en estos ámbitos”. Y Xerox “nos va a abrir sus bases de clientes de servicios de impresión y outsourcing de procesos de negocio (BPO) para poder ofrecerles el resto de nuestro portfolio, al tiempo que nosotros nos comprometemos a ayudar a Xerox a identificar y desarrollar oportunidades de BPO sobre toda nuestra base de clientes europeos. Con el acuerdo nos convertimos en proveedor de referencia de Xerox en todas las necesidades de TI que tengan”.
“Las elecciones en España están frenando proyectos”
Aunque España está lejos de lo que facturan mercados más fuertes para Atos como EEUU, Francia, Alemania, Reino Unido y Holanda, Lozano explica que Iberia es la séptima zona geográfica por ingresos:factura unos 400 millones al año (unos 480 millones si se suman Atos Worldline, un vehículo específico societario creado para el negocio de medios de pago y gestión de transacciones de la compañía, y el negocio vinculado a los Juegos Olímpicos). “Estamos orgullosos de esa posición, más teniendo en cuenta que mi perímetro de gestión abarca un país que ha sido intervenido y otro intervenido solo en el sistema financiero”. De la facturación, el 98% corresponde a España.
Lozano ve mejoras en la economía española. “Muchas empresas han aumentado el capítulo de inversiones, aunque siguen pidiendo a los proveedores ahorros y presionando sobre las tarifas”. El directivo confía en que los presupuestos se ejecuten tal y como se han diseñado, “y que no haya variables, como la de Grecia, que desemboquen en otra pérdida de confianza”.
“Atos en España creció orgánicamente en el último trimestre de 2014 y lo ha hecho en el primer semestre del año”, insiste Lozano, que apunta que el objetivo de su grupo a tres años (hasta 2016) es crecer entre un 3% y un 5% y “España mantiene ese objetivo”. No obstante, advierte que el sector público, uno de los mayores consumidores de la industria TI, sufre un parón por los procesos electorales. “Basta ver Andalucía, donde las elecciones y el posterior proceso de composición del Gobierno ha retrasado el avance del Centro de Innovación y Tecnología para la Protección de Infraestructuras Críticas (Citpic)”.