Incubadoras para acelerar ciudades, y no sólo startups
Consiguen crear, de media, 6,2 puestos de trabajo por empresa, que se establecen en la zona donde se ha creado el vivero de empresas.
Los programas de incubación puestos en marcha en los viveros de empresa están teniendo mucho éxito, y no sólo por el buen funcionamiento de las startups, ya que también las ciudades en las que se implantan notan económicamente el buen desarrollo de éstas. Por cada empresa incubada se crean una media de 6,2 puestos de trabajo.
Estos viveros de empresa son auténticos focos de creación de riqueza y empleo. Las compañías que se desarrollan en ellas incrementan las posibilidades de éxito en un 50%. Sin lugar a dudas, se presentan como una propuesta muy atractiva para aquellas regiones que busquen dinamizarse, gracias a su capacidad para generar una red productiva e innovadora.
El fundador de Cink Emprende y encargado de gestionar ocho incubadoras en España, Raúl del Pozo, recuerda que aunque el concepto de viveros aterrizó tarde en España en comparación con otros países de nuestro entorno, ahora son empleados por las administraciones "como una herramienta encaminada al desarrollo económico de un municipio o una región, y como consecuencia, a la creación de empleo".
Desde estas incubadoras se apuesta de manera decidida por fomentar el emprendimiento y la creación de nuevas compañías creando un empleo de calidad y estable. Cataluña, Andalucía y Madrid, con más de 30 viveros cada una, son las regiones que más apuestan por ellos.
Para que las incubadoras puedan ayudar en la aceleración de una región deben conseguir que las empresas se adapten al mercado de manera inmediata. En lugar de apostar por modelos de gestión tan generalistas se debería implantar un servicio más personalizado que se adaptase a las necesidades de cada emprendedor y región en la que se vaya a instalar, con el propósito de conseguir una hoja de ruta fabricada a medida de cada compañía.
Problemas a superar
En la actualidad los programas de incubación puestos en marcha en los viveros de empresas buscan solucionar los tres problemas básicos a los que se enfrentan la mayoría de los negocios de nueva creación, que son las dificultades de acceso a la financiación, la falta de capacidad de gestión y una inadecuada evaluación de los riesgos empresariales.