“Es posible que haya fusiones entre las grandes telecos”
Después de años de frenazo a causa de la crisis, las fusiones y adquisiciones corporativas (M&A) subieron con fuerza el año pasado y mantiene esta tendencia positiva en lo que llevamos de 2015. HernanCristerna, codirector de M&A Global de JP Morgan, afirma que el regreso de la confianza al mercado ha sido decisivo para volver a ver grandes operaciones entre compañías. Considera que los sectores de corte cíclico serán los más activos y solo se muestra preocupado por el daño a la confianza de las consecuencias de la crisis griega.
Pregunta. ¿Seguiremos viendo grandes operaciones este año?
Respuesta. La tendencia del negocio es francamente positiva. Es otra vez la época dorada del negocio de M&A. El año pasado ya fue muy bueno porque hubo un aumento del volumen del 30% y en lo que va de año vemos otro 30% de subida, aproximadamente. Ha habido una coyuntura muy positiva para hacer operaciones, incluso ya en 2012 y 2011, si me apuras. Las valoraciones eran muy atractivas, el acceso a la financiación era muy bueno, con mucha liquidez a bajo coste y muchas empresas entendían que M&A les podía ayudar en sus perspectivas de crecimiento pero faltaba la confianza. El gran agente de cambio en este negocio a partir de 2013 y 2014 ha sido la mejora de la confianza.
¿Qué riesgos existen para estas buenas perspectivas?
El riesgo más importante es Grecia. En este momento la situación es todavía cambiante y el resultado final no está claro, por lo que es difícil hacer cualquier pronóstico. En todo caso, los economistas de JP Morgan creen que la salida de Grecia de la Unión Monetaria Europea es ahora más probable, lo que puede tener un impacto en el crecimiento de la zona euro.
Uno de los sectores más activos ha sido el de las telecos enEuropa. ¿Seguirá siendo protagonista?
Sí porque hay muchas empresas que se ven necesitadas de reaccionar ante lo que hacen otras. Además, hay nuevos jugadores en el mercado. Por ejemplo, a la compañía Altice, que hace cuatro o cinco años nadie la conocía, el año pasado la acompañamos en la operación de SFr en Francia. Han hecho la operación de Portugal Telecom, se han lazando al cable en EE UU, también una posible oferta en Francia... Hay actores nuevos y eso va a llevar a que todo el sector reflexione sobre el futuro para que haya operaciones que generan valor. Lo que hace años era impensable, que hubiera operaciones entre las grandes (Deutsche Telekom, Telefónica, Orange, la propia BT hasta cierto punto) es ahora posible.
¿En qué otros sectores esperan más movimientos?
El farmacéutico es muy activo, pero en nuestro negocio vemos actividad en todos los sectores. En los que tienen un perfil más cíclico, a medida que la economía se va recuperando, veremos más actividad. Sectores como la industria tradicional, químicos, automoción, industria pesada… También, dada la coyuntura que hay en el negocio de petróleo y gas, es posible que haya empresas que se quieran beneficiar de un periodo intermedio en el sector con un precio del crudo que parece que va a mantenerse, pero a largo plazo no parece razonable que se sostenga en torno a los 65 dólares por barril. Por eso, creemos que es una coyuntura interesante para que las compañías se lancen a apostar a más largo plazo y tomar ventaja del precio actual del sector, como ha pasado con BG con el shale.
¿Qué otras tendencias aprecian este año?
El año pasado, la principal tendencia entre las compañías europeas era cómo diversificar las áreas de actuación para que no estuvieran totalmente expuestas a la recuperación económica en la región. Por eso vimos mucha actividad de empresas europeas comprando fuera en mercados con una trayectoria de crecimiento, como América Latina, o donde la recuperación fuera más clara, como en Estados Unidos. Gas Natural hizo una operación en Chile, trabajamos con Telefónica en la operación de GVT, Repsol compró Talisman… Esa tendencia se mantiene en la actualidad pero vemos una nueva, esta vez protagonizada por compañías nuevas que quieren invertir en Europa porque hay confianza en que la recuperación es más sólida, los múltiplos están por debajo de los de EE UU y Asia, y también ayudadas por la debilidad del euro. Hay empresas norteamericanas y asiáticas que quieren entrar en Europa porque ven una gran oportunidad de valor.