NH, cambios con viento de cola
El grupo hotelero NH ha pasado por numerosas vicisitudes, no en vano son siete los ejercicios consecutivos que lleva con pérdidas y tampoco reparte dividendo desde el año 2007. Sin embargo, el grupo aseguró en la última junta general de accionistas, celebrada la semana pasada, que espera cerrar 2015 con beneficios. La compañía hotelera prevé un crecimiento de entre el 5% y el 7% en los ingresos medios por habitación disponible, así como un aumento del 25% del beneficio bruto operativo. La opinión de rating de Axesor sobre la cadena hotelera es de CCC.
La liquidez de la compañía es ajustada, pero sin mostrar tensiones a corto plazo. Destaca la reversión del fondo de maniobra (ha pasado de un saldo negativo de 928,7 millones de euros en 2012 a uno positivo de 66,07 millones en 2014), que ha sido posible gracias, entre otras cosas, a la dispensa concedida en 2013 del cumplimiento de los ratios financieros acordados en un préstamo sindicado anterior, concertándose así un nuevo calendario de vencimientos que aporta un mayor equilibrio a la deuda.
Por otra parte, las refinanciaciones acometidas han dotado a NH de una mejora de la autonomía financiera, cierto margen de actuación y una definición libre de su estrategia, al dejar de estar a expensas de las condiciones y restricciones impuestas por el préstamo sindicado. Este proceso ha permitido aliviar el calendario de pagos, si bien el volumen de deuda sigue siendo elevado (907 millones de euros al cierre de 2014). NH afronta vencimientos de 74,42 millones en 2015 y 67,46 millones en 2016. A partir de 2017 podría detectarse una mayor presión, ya que en tres años la empresa tendrá que hacer frente a pagos por un importe total superior a los 580 millones de euros.
Entre las fortalezas de la compañía destaca su adecuado posicionamiento e imagen de marca. De hecho, la política de desinversiones ejecutada en los últimos años ha contribuido a una apropiada redimensión de la estructura y a una correcta implantación del plan estratégico. La estrategia de crecimiento está basada en la expansión internacional y la mejora de la calidad. La diversificación territorial es favorable, pero aún concentrada en la zona euro. En este sentido, la adquisición de Hoteles Royal, formalizada en marzo, reforzará la presencia del grupo en Colombia, Chile y Ecuador. NH espera, además, iniciar este año la primera fase de su joint venture en China con la gestión de 2.000 habitaciones en el país asiático. Por otra parte, la empresa está en plena ejecución de un plan de renovación que afectará a unos 70 hoteles (solo en este año se acometerán reformas en 33) y que implica una inversión de 227 millones de euros.
La hotelera ha vivido cambios recientes en su accionariado, como la desinversión de Santander (8,56%), cuya posición no era estratégica para la entidad, o el hecho de que el accionista de referencia sea ahora un inversor cualificado como el grupo chino HNA (29,5% del capital), que abre la puerta a una mayor implantación en el mercado asiático, hasta ahora minoritario para NH. Dentro del grupo hay una presencia importante de fondos de inversión, como Oceanwood Capital Management (7,58%); Taube Hodson Stonex (3,893%) y Schroders (3,018%), así como una serie de inversores institucionales con participación inferior al 3%. Si finalmente hubiera una opa de control de HNA, es probable que estos fondos estuvieran dispuestos a vender. A todo esto se suma la incertidumbre generada tras el reciente nombramiento del presidente de la compañía, Rodrigo Echenique, como presidente de Santander España, con lo que incrementa sus responsabilidades dentro de dicha entidad financiera. En todo caso, los cambios que pudieran sucederse a partir de ahora a este respecto no tendrían, en principio, impacto en el rating.