Ibex 35: encefalograma plano entre Grecia y EE UU
El interés del bono español a diez años marca máximos desde noviembre Unos sólidos datos en EE UU desalientan al mercado porque acercarían el alza de tipos
De alcanzar niveles máximos con la aparente facilidad con la que Contador coronaba en el Giro las grandes cumbres montañosas de Italia a renquear como los ciclistas que hacían la goma y perdían contacto con el pelotón. Así podría describirse el viaje seguido por las Bolsas europeas en las últimas semanas. Atrás quedan las subidas triunfales de comienzos de año. Ahora todo son dudas, falta de ideas y, como se dice en el argot ciclista, pájaras. A duras penas ha conseguido el Ibex 35 empezar junio con números verdes, impulsado por un moderado optimismo en Grecia y por unos buenos índices de actividad empresarial que las sólidas cifras macroeconómicas publicadas en Estados Unidos han rebajado por la cercanía del alza de tipos en aquel país.
El selectivo español, que ha llegado a avanzar siete décimas porcentuales en algún momento de la sesión, acaba subiendo apenas un 0,18% hasta los 11.238,1 puntos. Un camino similar han seguido el Dax alemán, que sube un 0,4%; el Mib italiano, que desciende un 0,11%, y el Cac francés, que avanza un 0,4%.
Dentro del Ibex, los mejores valores del día en el selectivo español han sido Inditex, que avanza un 2,14%, Popular (+1,17%) y Mediaset (+1,66%), mientras que encabezan las caídas FCC (–3,17%), Gamesa (–1,75%) y OHL (–1,29%).
Hoy ha habido un cruce de declaraciones menos amistoso que lo que venía siendo habitual en las últimas semanas entre Grecia y sus acreedores, ya que Alexis Tsipras afirma en un artículo publicado en el diario Le Monde que el acuerdo se está retrasando por "propuestas absurdas" de la troika. Bruselas ha respondido que es el momento de la unidad y de ofrecer propuestas concretas.El Ase heleno cae un 1,44% y el interés del bono griego a diez años sube al 11,54%.
Sin embargo, la sesión de hoy ha estado más marcada, al menos en su parte final, por Estados Unidos. Hace tiempo que el mercado dejó de analiza los datos macroeconómicos a la antigua usanza, es decir, festejando con alzas bursátiles las buenas cifras y cayendo con las malas. Ahora es casi al revés, y lo ocurrido en la sesión de hoy da buena cuenta de ellos. El índice ISM de actividad del sector manufacturero en EE UU sube más de lo esperado (52,8 puntos frente a 52), al igual que lo han hecho los gastos de construcción de abril.
Ambos datos muestran una fortaleza de la economía estadounidense que podría adelantar la subida de tipos que la Reserva Federal planea aprobar este año. De ahí que, tras conocerse las cifras, Wall Street se haya dado la vuelta para entrar en terreno negativo, arrastrando también a los parqués europeos. También ha subido la rentabilidad del bono estadounidense a diez años. Esos buenos datos en EE UU han pesado más que el positivo índice PMI de actividades en la zona euro, particularmente positivo en España, donde subió a los 55,8 puntos.
La cercanía del primer incremento del precio del dinero en Estados Unidos desde 2006 fortalece al dólar frente al resto de divisas. Por eso, el euro se deprecia hasta las 1,09 unidades del billete verde.
El próximo viernes se publica un dato clave para los siguentes pasos de la Fed en política monetaria, la cifra de empleo en mayo. Desde Ebury indican que “una creación de empleo neta del rango de entre los 200.000 y los 250.000 puestos de trabajo creados debería mantener la intención de la Fed de ejecutar la primera subida de tipos entre julio y septiembre de este año”.
A las Bolsas europeas les ha faltado el apoyo del mercado secundario de deuda. El interés del bono español a diez años sube hasta el 1,93%, su nivel más alto desde noviembre del año pasado. La prima de riesgo avanza hasta los 140 puntos básicos.
Mientras, el precio del barril de petróleo Brent desciende un 1,7% hasta los 64,4 dólares. El próximo viernes se celebra la asamblea de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y es precisamente este poderoso cártel el que provoca el descenso del oro negro. En mayo, la OPEP alcanzó un récord de producción en dos años y medio al situarse en los 31,22 millones de barriles al día, a pesar de que su objetivo oficial de producción es de 30 millones de barriles. Esta noticia augura que el grupo de 12 países no recortará la producción de petróleo en su encuentro del viernes y seguirá agrandando el exceso de oferta en el mercado.