Retorno absoluto: un toque de color
Son tiempos revueltos. Lo que antes se consideraba seguro, la renta fija, ahora es la que da sobresalto. El actual panorama de tipos de interés por los suelos, en negativo incluso en algunos bonos europeos, al mismo tiempo que los vaivenes en las Bolsas, están provocando que los inversores, sobre todo los más conservadores, busquen otras fórmulas.
“La demanda de retorno absoluto es mayor ahora que antes”, asegura David Oliphant, de Columbia Threadneedle, ya que “debido a la baja rentabilidad de los fondos convencionales de renta fija, los inversores se están viendo empujados a alternativas de otra naturaleza. Algunas, como la renta variable, pueden ser atractivas, pero al conllevar riegos mayores no son para todo al mundo”.
“En este momento, los inversores se plantean incorporar activos no tradicionales a las carteras e invertir con enfoques más eficientes, para así convertir la incertidumbre en una oportunidad. Pero, sobre todo, demandan fondos que puedan navegar bien en las caídas tras las importantes rentabilidades registradas en algunos mercados y la volatilidad registrada por la deuda soberana”, resume Sophie del Campo, directora general de Natixis Global AM para Iberia, Latinoamérica y US Offshore.
¿A quién le interesa este tipo de estrategias inversoras? “Son especialmente interesantes para los inversores en un entorno en el que hay una búsqueda cada vez mayor de fuentes de diversificación de cartera”, asegura Sasha Evers, director de BNY Mellon IM Iberia. “Es una opción para quienes buscan estrategias de inversión de baja volatilidad que les ayuden a diversificar sus carteras pero también a conseguir rentabilidad en mercados alcistas y bajistas”.
“Es un sustituto perfecto para los productos puros de renta fija”, opinan en Carmignac
En opinión de Jean Médecin, miembro del comité de inversiones de Carmignac, el retorno absoluto “es un sustituto perfecto para los productos puros de renta fija a corto plazo y una alternativa magnífica a los depósitos de efectivo, con una rentabilidad del 0%”.
“Se demandan fondos que puedan navegar bien en las caídas”, afirman en Natixis
Este tipo de fondos, explican en BBVA AM, “basan su estrategia en la búsqueda de ineficiencias en los mercados y en las cotizaciones de los activos, de las que tratan de sacar partido mediante estrategias que muchas veces se implementan utilizando instrumentos derivados”. Otra de las características principales es que se gestionan de forma independiente a un índice de referencia de mercado con un objetivo predefinido sobre la tasa libre de riesgo.
“Normalmente presentan un riesgo inferior y son menos volátiles que los fondos tradicionales, ya que pueden utilizar plenamente las capacidades de selección de valores del gestor, una gama más amplia de oportunidades de inversión al no estar atados a un índice de referencia y mejoran la diversificación”, destaca Carla Bergareche, directora de Schroders para España y Portugal.
Además, apunta Pablo Nortes, analista de fondos de Tressis, “muchos de estos fondos surgen como segunda versión en formato pasaporte europeo (Ucits) de sus estrategias off shore, de los antiguos hedge funds. La ventaja es que acerca al cliente más retail un mundo que estaba al alcance de muy pocos”, reflexiona.
También Mariano Arenillas, responsable de ventas a terceros de Deutsche AWM, resalta que “este tipo de estrategias no son nuevas, pero lo que es más novedoso es la posibilidad de implementarlas en vehículos armonizados y regulados en vez de los tradicionales paraísos fiscales donde residen normalmente los hedge funds, ganando así en transparencia, liquidez y seguridad jurídica”. Ahora bien, según Enrique Borrajeros, de EFPA España, “la labor del selector de fondos en esta categoría es fundamental. Analizar y evaluar los aspectos cualitativos de los gestores, sus modelos y la evolución histórica del producto es esencial y no se resuelve con un mero análisis de rentabilidad y riesgo”.
A este respecto, el experto en fondos de inversión Martín Huete añade que, pese a que estos productos son convenientes para todo tipo de escenarios e inversores, “ojo, cada inversor es único, cosa que las grandes redes no tienen en cuenta”, y recuerda que estos se dividen en diferentes categorías de activo dependiendo de la volatilidad (riesgo) asumida a largo plazo para adaptarse a todo tipo de perfiles.
Luke Newman, gestor del fondo Henderson UK Absolute Return, también advierte de que este tipo de inversiones, si bien son fundamentales, “su asignación proporcional en las carteras debería incrementarse en mercados volátiles y bajistas y reducirse en mercados alcistas”.
Ricardo Gil, gestor de Trea Absolute 6, por su parte, cree que “este tipo de fondos deberían ser un todoterreno que adaptan sus estrategias a las situaciones de mercado, por lo que deberían estar en las carteras más conservadoras y moderadas entre el 10% y el 15% del patrimonio”.