Acciona tiene un plan para ganar más vistiendo parques eólicos
Ha bajado un 28% el coste de energía de las turbinas y va a por otra rebaja del 16%
El vuelco en el modelo de negocio de Acciona Energía, hace poco más de un año, con la decisión de construir, equipar y operar parques eólicos para terceros, dio una renovada oportunidad de supervivencia a la filial fabricante de aerogeneradores Windpower, que ahora brilla en los resultados del grupo tras pasar horas bajas. Y el anuncio del Gobierno sobre próximas subastas de energía eólica con derecho a incentivo reanima un mercado local aletargado. El pulso entre Acciona Windpower, Gamesa y demás competidores, está servido.
La reforma eléctrica en España, con el consiguiente ajuste en las expectativas de negocio, motivó una drástica reducción de la inversión por parte de la empresa que preside José Manuel Entrecanales, en línea con el resto del sector. A Windpower, hasta entonces centrado en suministrar a las instalaciones del grupo, le quedaba incidir más en la internacionalización, abrirse a clientes externos y tratar de competir con su turbina de 3 megavatios (MW). Antes de todo ello, fichó a José Luis Blanco, con 15 años de experiencia en Gamesa, para reflotar las fábricas.
Los resultados se han apreciado en los primeros meses de este año: Acciona reconoció la semana pasada en la presentación de resultados trimestrales que buena parte del tirón en su beneficio se debe al comportamiento de Windpower. Los ingresos de la filial se han más que duplicado, pasando de los 74 millones de hace un año a 188 millones al cierre de marzo; el ebitda era negativo en cuatro millones y ahora asciende a 15 millones a favor de Acciona, y el margen bruto de explotación, que era negativo, sube al 8,2%.
Un 153% han crecido los ingresos de Windpower en el primer trimestre, hasta los 188 millones
Los megavatios instalados entre enero y marzo ascienden a 187 –fueron 83 MW en el mismo periodo de 2014–, con un 100% de esta actividad en el exterior; el 100% de los pedidos ejecutados se basan en la turbina de 3 MW, conocida como AW3000, y el 91% de los megavatios han sido para clientes ajenos a Acciona. Una tendencia que va a más: desde diciembre, Acciona Windpower (AWP) ha firmado contratos por 324 MW, elevando la cartera de pedidos a 1.230 MW principalmente en Brasil, Estados Unidos y México. Los nuevos encargos son para terceras empresas. De hecho, un último pedido de 195 MW en Brasil hace que AWP supere los 1.000 MW vendidos allí.
Acciona explica que el producto estrella de su catálogo de aerogeneradores dio un salto hacia una mayor competitividad al reducir el coste de energía asociado a cada máquina: bajando la inversión necesaria en todo el proceso de producción, así como el coste de operación y mantenimiento durante los 25 años de vida media útil del AW3000. Ganan los clientes, mientras el fabricante defiende su margen en un mercado de precios volátiles.
Si el citado coste de la energía que se traslada al cliente final de la turbina, medido en KW/hora, se rebajó un 28% entre los años 2013 y 2014, y se ha mejorado la eficiencia en las plantas, la compañía se ha marcado el objetivo de dar una nueva vuelta de tuerca al negocio.
En palabras de responsables de Acciona, este brazo industrial pecaba de trabajar con poco volumen –lo que encarecía la cadena de suministro– y con un excesivo margen temporal en las entregas. Ahora, la mayor cartera, una turbina probada y mercado abierto en países como Brasil, México, permiten un nuevo objetivo para los dos próximos años de rebajar de nuevo el coste de energía de las turbinas un 16%.
Windpower surgió dos décadas atrás para atender las necesidades de Acciona en el eólico, donde había escasez de proveedores. Esta llegó a verse obligada a arreglar sus palas en talleres de tablas de surf de Tarifa (Cádiz). De ahí a nuestros días, AWP ha conseguido superar los 700 millones de facturación en 2014 pese a que se llegó a especular durante la crisis con cierre de plantas en España y se tomaron serias decisiones en torno a ajustes en el coste de la plantilla. Ya su ritmo cardiaco era estable e instaló 762 MW, cuatro veces más que en 2013.
En busca de una mayor agilidad comercial
La política comercial de Acciona Windpower pasaba por invertir entre dos y tres años en desarrollar un determinado modelo de turbina, certificarlo y ponerlo en el mercado. A partir de ahí, había que cruzar los dedos para vender y, sobre todo, para que la competencia no presionara con productos de igual o superior calidad.
El modelo ha evolucionado notablemente asumiendo algún riesgo adicional. Acciona Windpower realiza el diseño y sale con él al mercado, asumiendo ante los clientes un compromiso de tiempo de producción y coste con los clientes. El desarrollo se lleva a cabo, de forma general, con el contrato ya firmado. De este modo, entre la concepción del pre-diseño y la venta del producto apenas pasa un año, rebajándose el plazo a la mitad. La empresa minimiza errores gracias a su experiencia y de este modo puede anticipar sus ventas.