Mejorar es difícil para Ryanair
"Siempre mejorando” se está convirtiendo en algo complicado para Ryanair. La estrategia de la compañía de bajo coste de ser amable con los clientes, puesta en marcha hace un año bajo ese lema, ha sido una bendición para los accionistas hasta el momento. El número de pasajeros ha subido un 10%. El beneficio neto es probable que salte el 60% este año. Pero el futuro parece más sobrio. Después de ganar casi un 50% desde mediados de octubre, la acción ricamente valorada parece vulnerable.
Los títulos de Ryanair cayeron un 4% después de que describiera ayer unas perspectivas cautelosas a medio plazo. El grupo no se beneficiará mucho de la caída de los precios del petróleo por sus extensas coberturas de riesgos. La aerolínea ha bloqueado los precios del petróleo en por lo menos 92 dólares por barril para el 90% de su consumo de combustible de este año y el próximo. El Brent actualmente cotiza a menos de 55 dólares el barril.
Financieramente los rivales más débiles no cubren tanto y se beneficiarán de un combustible más barato más rápido. Es probable que aumenten los vuelos y bajen los precios de los billetes. Esa competencia hará daño a Ryanair. Citigroup espera que los precios de billetes de las aerolíneas caigan entre un 5% y un 6% en 2015 y 2016.
Los costes no relacionados con los combustibles de la aerolínea con sede en Dublín también están aumentando. Cortejar a los clientes de negocios significa volar a aeropuertos más atractivos y menos remotos, que cobran tarifas más altas. Dichos cargos han aumentado hasta un 23% en el tercer trimestre. Los ingresos han estado aumentando más rápido que los costes hasta el momento, pero eso puede cambiar a medida que la competencia se haga más dura. A pesar de su caída de ayer, las acciones se acercan a máximos históricos.
Las relaciones laborales son otra preocupación. Ryanair emplea a casi el 70% de sus pilotos como trabajadores por cuenta propia. Un grupo no oficial que afirma representar a más de la mitad de estos está haciendo campaña por unos mejores salarios y condiciones. Una posible escalada del conflicto podría perjudicar a sus ingresos. Ryanair vuela alto, pero el aire es cada vez más fino.