Hacienda se plantea bajar más los impuestos si la recaudación crece
España es un país fiscalmente atractivo para invertir y con un compromiso en el control del déficit. Esas son las dos ideas que Miguel Ferre, secretario de Estado de Hacienda, ha trasladado a los gestores de fondos extranjeros en la segunda jornada del evento Spain Investors Day. Además, les ha asegurado que si la presión fiscal (el cociente entre lo recaudado por impuestos y la riqueza del país) se eleva por encima del 38% o del 39 % del PIB, el Gobierno estudiaría una nueva rebaja de impuestos.
En declaraciones a los periodistas tras intervenir en la quinta edición del foro financiero, Ferre ha señalado que el objetivo es que la presión fiscal se mueva en ese rango. En 2013, la presión fiscal ya se situó en el 37,8%. Esta posible rebaja se sumaría a la ya prevista para 2016. En todo caso, señaló que se decidirá “cuando se sepa en su momento” cuál es la recaudación. “Consideramos que no es necesario recaudar tanto en España y se volverían a hacer reducciones de impuestos”.
Asimismo, ha indicado que el Gobierno está ultimando la modificación de la Ley General Tributaria que incluye la denominada lista de morosos.
Durante su intervención ante representantes de las principales empresas del país e inversores internacionales, el secretario de Estado ha incidido en que la reforma fiscal ya está impulsando la actividad económica en España y le permite liderar el crecimiento de la Unión Europea después de siete años de crisis.
Ferre ha explicado a los inversores que la reforma fiscal incluye una rebaja del impuesto de sociedades (del 30 % al 28 % en 2015 y al 25 % en 2016), que sitúa este tributo por debajo del de los principales socios comerciales como Alemania, Francia o Italia, “lo que nos sitúa como un país muy competitivo para atraer capitales”, ha asegurado. También detalló algunos incentivos para las empresas como la reserva de capitalización por la que se podrá reducir un 10% la base imponible del impuesto si se dedica a capitalizar la compañía.
También ha destacado que la reforma fiscal va a liberar 9.000 millones de euros, según el Gobierno, en renta disponible para las familias en 2015 y 2016, lo que, en principio, se debería trasladar en una mayor dinamización de la economía. Precisamente por no cortar esa actividad, Ferre ha descartado una nueva subida del IVA general (actualmente en el 21%) tal como se ha solicitado desde diversas instituciones.
A pesar de las rebajas fiscales, Ferre ha reconocido a los inversores que el Gobierno sigue firme en su propósito de consolidación fiscal comprometido con Bruselas para la reducción del déficit público. En los últimos años “hemos ganado en transparencia sobre las cuentas públicas de las Administraciones”, ha asegurado.