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Año de cambios en el sector

Los asuntos pendientes de los líderes de infraestructuras

Las claves son refinanciar deuda, vender activos y abrir nuevas vías para crecer fuera Acciona, Abertis o ACS se plantean sacar a Bolsa filiales para impulsar su desarrollo

Vista de la ampliación del Canal de Panamá.
Vista de la ampliación del Canal de Panamá.Efe
Javier Fernández Magariño

Las empresas españolas de infraestructuras arrancan un ejercicio clave, entre la oportunidad de seguir desarrollando su alcance internacional y la necesidad de terminar de digerir los duros efectos de la crisis. Los retos pasan por atraer financiación a los proyectos en espera de que vuelva la banca comercial; captar el interés de los fondos de inversión y de pensiones, o reforzar el capital con nuevos socios. Distintas refinanciaciones, desinversiones y adquisiciones están lanzadas y harán de 2015 un año movido para un sector que en España afronta un final de legislatura con asuntos pendientes como la privatización de Aena, la apertura del AVE a la competencia o la nacionalización de las autopistas quebradas.

Estos son algunos de los pasos más importantes que darán las empresas de referencia del sector en los próximos meses.

Abertis

La mayor operadora de autopistas del mundo tiene anunciada la salida a Bolsa de su división de telecomunicaciones. Abertis Telecom seguirá controlada por su actual matriz y prevé una colocación en el segundo trimestre principalmente entre institucionales. La nueva cotizada deberá balancear el pago de dividendos con un ambicioso plan de inversión en busca de crecer en antenas de telefonía móvil en mercados como Italia, Reino Unido, Alemania o Portugal. Telecom gestiona hoy 3.000 puntos de señal de radio y televisión, todos ellos en España, y 4.700 torres en este país e Italia.

Liberada de su compromiso de desarrollar Abertis Telecom, Abertis podrá centrarse en la conquista de nuevos mercados de autopistas como Estados Unidos y Australia. La compañía que dirige Francisco Reynés ha puesto su objetivo en la mayor concesión de una carretera en EE UU, la Indiana Toll Road (ITR), por la que compite con Ferrovial tras la entrada en concurso de la concesionaria.

Este nuevo año también es el del arranque del plan estratégico 2015-2017. A nivel de ebitda, el objetivo es hacerlo subir un 8% anual de aquí a 2017, hasta los 4.000 millones. El plan viene acompañado de un segundo mandato de mayor eficiencia que busca incrementar el rendimiento bruto de explotación del 64% al 68%. También promete el pago de 2.000 a 2.200 millones en dividendos tras un incremento del 5% en cada uno de los tres próximos ejercicios.

Pablo Monge

Un plan 'B'

Acciona, presidida por José Manuel Entrecanales, busca la expansión de sus renovables en el exterior en alianza con KKR ante la deriva regulatoria del sector en España.

Más rentable, enfocada al negocio de las autopistas, abriendo mercados y con cambios a nivel de staff que ponen a la dirección más cerca de los negocios. Así quiere ser Abertis en 2015, pero también deberá capear crisis como la que se abre en Francia, donde es la tercera operadora del país y siente la presión de un Gobierno que planea un nuevo impuesto sobre el beneficio por la gestión de autopistas.

Acciona

Una salida a Bolsa, con el negocio internacional de renovables, y una desinversión, la de Trasmediterránea, son dos de los proyectos que acometerá Acciona en los próximos trimestres.

Golpeado por la reforma energética en España, el grupo de la familia Entrecanales ha creado una sociedad conjunta con el fondo KKR, Acciona Energía Internacional, para hacerla cotizar en Nueva York. La firma cuenta con 55 parques (2,3 GW) en 14 países, con una vida útil de 21 años.

En cuanto a la venta de Trasmediterránea, se busca un acuerdo con el fondo Cerberus que podría valorar la naviera en unos 120 millones. Balearia no ha dejado de mirar la operación.

Aparte de estos movimientos, Acciona mantiene una batalla con Agbar, de incierto resultado, tras ganar la gestión del agua en la cuenca alta de Barcelona. Su otro gran asunto en el aire es el contrato para construir un túnel de 5.300 millones de dólares australianos (3.600 millones de euros) en Melbourne (Australia). El nuevo primer ministro de Victoria, el laborista Daniel Andrews, llevaba en su programa la paralización del proyecto, pero se enfrentaría a fuertes indemnizaciones de dar ese paso.

ACS

Su consejo avanza hacia un liderazgo compartido entre Florentino Pérez y quien es su mano derecha en Hochtief y Leighton, Marcelino Fernández Verdes. Se especula con el nombramiento de consejero delegado en la junta de este año, pero desde ACS se guarda silencio respecto a este asunto.

Entre tanto, solo Dragados concursa por obras en Norteamérica por 13.200 millones tras convertirse en la primera constructora española con trabajo en el AVE de California. En México se acumulan proyectos industriales y se abona el campo para la apertura a nuevos socios de Avanzia, que reúne los distintos negocios del grupo en el país azteca. El plan de autopistas de Colombia tiene a ACS como una de las principales adjudicatarias, con concesiones por 2.000 millones, y la compañía tantea nuevas inversiones para su concesionaria Iridium en Perú, Chile o el citado mercado de México.

A nivel financiero, el grupo busca nuevas condiciones para una deuda que quiere atajar vendiendo sus renovables y con la salida acelerada de Iberdrola.

Getty Images

El salvavidas

el nuevo primer accionista de FCC, Carlos Slim, ha inyectado 650 millones de eurosy promete abrir nuevas expectativas de negocio para el grupo español.

FCC

La entrada de Carlos Slim en FCC, como primer accionista, ha supuesto un balón de oxígeno tanto para la constructora como para Esther Koplowitz, con la que el magnate mexicano tiene un pacto de control. Con Juan Béjar al frente de la dirección durante 2015, no se esperan grandes vaivenes en la gestión. Sin embargo, la apuesta de Slim abre nuevos campos de desarrollo a FCC especialmente en Latinoamérica.

La compañía debe vender aún Realia y Globalvía, seguirá plantando cara a su carga financiera y tratará de equilibrar la situación de la filial cementera Cementos Portland, afectada por el duro descenso de la demanda en España.

Ferrovial

El grupo de la familia Del Pino ha aprovechado parte de la crisis para reforzarse, tras verse obligado a fuertes desinversiones en los primeros años de la debacle económica, entre otras cosas por la morosidad de las administraciones públicas españolas. Ferrovial está rearmando su división de aeropuertos, está con la cartera en registros históricos y sigue invirtiendo fuerte en autopistas, especialmente en EE UU. En ese país aspira a concesiones por casi 13.000 millones.

Entre sus proyectos fallidos por el momento está el de una adquisición que le dé volumen en Australia una vez que descartó comprar la constructora John Holland y el conglomerado de servicios Transfield. Otro de los procesos en marcha es la entrada en el núcleo duro de accionistas de Aena con un 6,5% del capital, pendiente de si el Gobierno lanza la salida a Bolsa en febrero.

OHL

Una de las principales tareas sobre la mesa de Juan Miguel Villar Mir es despejar cualquier tipo de duda sobre la solvencia técnica y económica de su constructora, OHL. La compañía ha ido ganando en los últimos años algunos de los contratos más destacados del mundo de las infraestructuras, pero ha sido retirada de la construcción del hospital catarí Sidra (1.800 millones) y desde Arabia Saudí llegan críticas sobre la labor de las constructoras en la ejecución del AVE entre Medina y La Meca.

El pasado ejercicio ha sido de fuerte castigo en Bolsa, con un descenso del 35%, y en el último mes el propio Villar Mir tuvo que comprometerse ante el mercado a no bajar del 51% del capital a la vista de que vendió un 3,4% de OHL desde finales de septiembre, en plena caída del valor.

En términos financieros, la deuda neta había crecido un 18% al cierre del tercer trimestre respecto al arranque del ejercicio, hasta los 6.545 millones. El consejero delegado de OHL, Josep Piqué, viene insistiendo en que la deuda con recurso habrá bajado de los 1.000 millones a 31 de diciembre de 2014. Para ello ha vendido un 7,5% de OHL México y un 5% de Abertis, este último paquete traspasado a otra sociedad del grupo Villar Mir. Las agencias de calificación están vigilando a la compañía con lupa, mientras esta ultima un plan estratégico 2015-2017 con especial hincapié en Oriente Medio y el área Asia-Pacífico.

Sacyr

La refinanciación del crédito por la participación del 9% en Repsol vuelve a ocupar a Sacyr, pero esta vez no espera “excesivas complicaciones” para cerrar un acuerdo y seguir en la petrolera. Eso sí, la empresa debe 2.276 millones y no descarta vender parte del paquete si eso allana el camino.

Para 2015 también está pendiente la venta en Bolsa de parte de la patrimonialista Testa, así como la salida total de Itínere (15,5%).

A nivel operativo, Sacyr desarrolla su filial de construcción industrial y tiene en la joven división de concesiones un futuro motor de ebitda. En construcción sigue adelante con la ampliación del Canal de Panamá y tiene reclamaciones por 2.300 millones de dólares por sobrecostes en esa obra. Los árbitros empiezan a dar la razón a la constructora española y sus socios en el proyecto panameño.

Sobre la firma

Javier Fernández Magariño
Es redactor de infraestructuras, construcción y transportes en Cinco Días, donde escribe desde junio de 2000. Ha pasado por las secciones de Especiales, Cinco Sentidos, 5D y Compañías siguiendo la información de diversos sectores empresariales. Antes fue locutor de informativos en la Cadena Cope, además de colaborar en distintos medios de Madrid.

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