El Ibex frena y frustra su cuarta subida consecutiva
El Ibex ha terminado por desinflarse después de tres jornadas se alzas consecutivas, alentadas por la expectativa de compra de deuda soberana por parte del BCE. La banca, principal motor del ascenso, ha echado el freno en una jornada que se convierte en preludio del puente que inicia mañana la Bolsa de Wall Street.
Quienes pensaban que la Bolsa, y en especial los valores bancarios, habían caído a unos niveles en los que merecía la pena comprar parecen haber cumplido su objetivo, al menos para los próximos días. La Bolsa de Nueva York cierra mañana con motivo de la celebración del día de Acción de Gracias y el viernes habrá solo media sesión, lo que rebajará la intensidad de la negociación. Además, llegada esta fecha, numerosos gestores dan por cerrado el año en los mercados, lo que podría limitar notablemente el recorrido que aún pueda quedar en lo que resta del año para numerosos valores.
El paréntesis que impondrá mañana Wall Street ha dejado al Ibex muy cerca de los 10.700 puntos, que no ha llegado a conquistar al cierre pese al avance acumulado del 4,8% en las tres sesiones precedentes. Hoy ha quedado en los 10.647 puntos, al ceder el 0,49%, una leve variación que ha estado en línea con las escasas oscilaciones del resto de mercados europeos, incluido Wall Street. El rendimiento del bono continúa por debajo del 2% aunque se haya encarecido hoy levemente, hasta el 1,976%.
En el signo negativo del Ibex influyó el retroceso registrado por los grandes valores, como Telefónica, Santander y el resto de bancos, con excepción de Bankia, que cerró en tablas. El valor más castigado fue Amadeus, con una caída del 2,5%, en respuesta a la venta del 1,4% de su capital por parte de Air France.
Estados Unidos ha aportado las principales referencias macroeconómicas del día, si bien no han llegado a agitar el parqué. Los inversores han conocido el dato de peticiones semanales de desempleo, que han superado las previsiones: 313.000 solicitudes, frente a las 288.000 estimadas. El índice manufacturero de Chicago también arroja una lectura más débil de lo previsto, al quedar en noviembre en los 60,8 puntos, desde los 63 puntos previstos y los 66,2 del dato anterior. Y las ventas pendientes de viviendas han sufrido un descenso del 1,1% en el mes de octubre, en contraste con el alza del 0,5% esperado.
A falta de señales evidentes de reactivación económica, mucho más claras en cualquier caso en Estados Unidos que en la zona euro, los inversores siguen centrando sus esperanzas en las compras de deuda soberana por parte del BCE, alentadas por el propio Mario Draghi la semana pasada. El vicepresidente, Vítor Constancio, advirtió hoy que, en cualquier casi, la decisión sobre esas compras no se tomará hasta el primer trimestre de 2015.
Nuevo mínimo en cuatro años del petróleo
En espera de nuevas pistas del BCE, que se reúne la semana que viene, mañana se reúnen en Viena los principales productores de petróleo del mundo: los 12 miembros de la OPEP en el encuentro oficial mientras algunos invitados ilustres como México y Rusia participan, también en reuniones bilaterales. El objetivo teórico del cártel es mantener estables los precios del barril, y la caída a menos de 80 dólares hace que algunos de ellos quieran recortar la oferta para aumentar precios. Pero no se espera consenso y el Brent sigue a la baja, Hoy ha perforado el nivel de los 78 dólares por barril, hasta los 77,94 dólares, marcando nuevos mínimos de los últimos cuatro años, si bien se ha colocado poco después sobre esa cota.