Juan Lema ya pide al Gobierno como nuevo presidente de las ingenierías
Juan Lema, nuevo presidente de la patronal de las ingenierías, Tecniberia, ha demandado esta mañana al Gobierno más apoyo para la internacionalización de las empresas del sector. Reclama avales de la banca privada y pública para acudir a los concursos; pone de manifiesto que sigue existiendo un problema de homologación de los títulos españoles de ingeniería que impide trabajar a numerosos profesionales fuera de España, y pide apoyo al Ministerio de Asuntos Exteriores para obtener información de los planes de infraestructuras de los países activos en obra civil en cuanto estos son publicados: “Acceder lo antes posible a la información nos ayudaría a buscar alianzas, financiación y a estudiar los proyectos”, ha comentado en rueda de prensa.
Lema, presidente de Aena con el Gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero, no ha querido entrar a valorar el actual proyecto de privatización del gestor aeroportuario: “Salí de la compañía hace tres años y solo puedo manifestar respeto a las decisiones de la actual dirección de Aena”. Su papel ahora es de interlocutor del sector de la ingeniería con el Gobierno, del que asegura haber obtenido un buen recibimiento. Su contrato con la patronal es indefinido y asegura que se ha valorado su perfil técnico por encima de cualquier componente político.
El presidente de Tecniberia ha alertado de la grave situación que vive el sector: “Entre 2009 y 2014 habremos perdido 20.000 empleos, muchos de ellos de alta cualificación, y hasta un 40% de las empresas han tenido que cerrar”. Según sus cálculos, alrededor del 80% del nuevo negocio generado por la ingeniería española procede ya del exterior ante el derrumbe de la construcción.
En este contexto de crisis y austeridad en la inversión, Juan Ignacio Lema demanda “que se pague los que es justo por la ingeniería”. Desde Tecniberia se apunta que la fase del proyecto de una obra civil se lleva un 2% de media del presupuesto total, cuando en el exterior esa partida suele rondar el 5%. “Garantizamos la máxima calidad de los trabajos, pero menores partidas nos llevan a tener menos ingeniería en las obras. Mayor inversión se traduciría en menores modificados técnicos y posteriores ahorros”, argumenta.
Uno de los caballos de batalla de la patronal es que la Administración vuelva a valorar en los concursos públicos la valía técnica de las ofertas por encima de las propuestas económicas. “Tras las modificaciones legales de 2007 las valoraciones técnica y económica se reparten un peso del 50% en las puntuaciones. Nuestra propuesta es que se apueste por la calidad y la excelencia y que el porcentaje en la decisión de una adjudicación sea del 80% en el caso de la propuesta técnica”.
El presidente de Tecniberia ya ha mantenido contactos con altos cargos del Ministerio de Agricultura y Medio Ambiente, donde le aseguran que se tratará de ir a una ecuación que pondere en un 60% la puntuación técnica por un 40% en el caso de la económica. A partir de este punto, se tratará de convencer también al Ministerio de Fomento.
El papel de la ingeniería pública
Durante la presentación de Lema ante la prensa se ha abordado una de las habituales fuentes de preocupación en Tecniberia: el papel de la pública Ineco en competencia con el sector privado. El presidente del colectivo empresarial ha demandado “reglas claras y competencia leal”. Lema pide al Gobierno que no abuse de las adjudicaciones sin concurso (encomiendas de gestión) en el mercado local, salvo en caso estrictamente necesario y en campos donde no pueda actuar la ingeniería privada. También desea que Ineco sirva “realmente para identificar oportunidades en el exterior” que pueda compartir con el resto de un sector acuciado por la falta de trabajo: “Nos gustaría ver a Ineco como un aliado”, ha sentenciado la nueva cabeza visible de Tecniberia.
“El problema de la corrupción no es sistémico en España”
Con experiencia en la Administración, en la empresa privada y ahora al frente de la patronal de las ingenierías, Juan Ignacio Lema ha sido preguntado por la creciente oleada de casos de corrupción en España, muchos de ellos relacionados con el sector público y la contratación de obras y servicios, y Lema cree que el problema no es generalizado.
“La gran mayoría de trabajadores de la empresa privada y funcionarios trabajan con honestidad y el máximo esfuerzo. El problema de la corrupción no es sistémico en España. Los éxitos conseguidos por nuestras empresas son fruto del trabajo bien realizado, serio y competitivo, no de componendas”.