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Aseguran que sus descuentos son un 64% superiores a la media europea

Los vendedores de coches dicen que compiten de forma feroz

Los concesionarios se enfrentan a su proceso más duro. La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha puesto el foco sobre las prácticas anticompetitivas que llevaron a cabo varias redes de distribución durante años. Tal y como informó ayer Cinco Días, citando a fuentes conocedoras de la investigación de la CNMC, concesionarios pertenecientes a determinadas marcas de coches pactaban entre ellos no realizar descuentos superiores al 4% en sus ventas por modelo.

Entre las empresas sobre cuyas redes de distribución se ha incoado expediente y que está pendiente de resolución por la CNMC, se encuentran Seat, Volkswagen y Audi (que presumiblemente se eximirán de la multa por haberse acogido la primera al proceso de clemencia presentando pruebas sobre el presunto cártel), Nissan, Toyota, Land Rover, Hyundai, Opel, CitroënEspaña, B&M Automóviles, BMW Ibérica, Chevrolet, Mazda, Mercedes Benz, Orio Spain, Peugeot España, Porsche Ibérica, Renault España Comercial y Volvo Car España. Estas últimas 11 empresas fueron incluidas en el expediente el pasado 9 de mayo, mientras que las anteriores llevan con el expediente abierto desde agosto de 2013.

Desde la distribución de coches, por supuesto, niegan la mayor. Afirman que la competencia en el sector es mucha y muy alta. “Entre los concesionarios, hay dos niveles de competencia: la habitual entre marcas y otra, que llamamos concurrencia, que se da entre los puntos de venta de la misma marca”, explican. Es contra esa concurrencia contra la que estarían actuando los pactos que investiga la CNMC, que ha considerado probados en varios casos.

En el sector encuentran este punto prácticamente “imposible”. Aseguran que el cliente español se está beneficiando “de los descuentos más altos posibles”. De hecho, un informe interno de la patronal de los concesionarios Faconauto, al que ha tenido acceso este diario, detalla que los puntos de venta “compran los vehículos al precio recomendado o de lista, lo que supone pagar al proveedor una media de un 19% más del precio de venta retail o final, porque no se deducen los descuentos promocionales a clientes con el descuento del margen comercial que le corresponda al distribuidor en el modelo concreto”.

Este informe asegura que los concesionarios hacen una media de 4.100 euros de descuento por modelo vendido, lo que sitúa a España como “el mercado europeo comercialmente más agresivo, con un nivel de descuentos superior a un 64% de la media europea”. La media europea estaría fijada en 2.499 euros por modelo, detalla el documento que cita el Balance del Sector Automoción que realizó la consultora TNS examinando los datos del mercado en 2013. El balance incluye un descuento medio de 600 euros por los planes PIVE en el caso español.

“Los distribuidores”, continúa el informe, “adelantan a los clientes y, por tanto, financian este descuento medio de 4.102 euros o un diferencial entre el precio de compra y el de venta final al cliente durante un plazo medio variable de entre 30 y 45 días en 2013, lo que implica que hasta que no venden el vehículo al cliente final y lo matriculan, no pueden tramitar la recuperación de las promociones y descuentos aplicados al vehículo vendido, que siguen financiando entre 15 y 45 días”, detalla el estudio. En datos como estos, se apoyan también desde el sector para señalar la dificultad que tienen para realizar, en su caso, descuentos significativos de manera individual por modelo, por la escasez de márgenes que tienen para ahondar en la rebaja. “Y aun así, los concesionarios los hacen a los clientes, porque ellos lo piden para cerrar la compra y se exponen a perder la operación”, detalla un empresario.

“Por consiguiente”, establece el estudio, “los concesionarios garantizan un alto nivel de competencia entre las diferentes marcas y de concurrencia dentro de la red en un mercado maduro en el que ningún fabricante supera en 2014 el 9% de cuota del mercado de turismos.

Hasta 10 millones de multa por punto de venta

Las multas a las que se enfrentan los concesionarios españoles pueden ser aún más graves de lo esperado, según explican fuentes de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia. En concreto, las sanciones oscilan entre el 2% y el 10% de la facturación por establecimiento y podrían alcanzar los 10 millones de euros en el caso de que no se pueda establecer, o no quede clara, la facturación requerida. Las ventas que se tomarán como referencia serán las del año inmediatamente anterior al de la imposición.Según la Ley de Competencia, desde que el pliego de concreción de hechos llega a los presuntos infractores, sus abogados tienen un plazo de 15 días para presentar las alegaciones. Después, el instructor de la investigación las estudia y da traspaso de las mismas y de un informe al consejo de la CNMC, que es el encargado de decidir las sanciones. El monto está vinculado a la gravedad de las prácticas descubiertas por la CNMC. La ley establece que las sanciones se dividen en leves, graves y muy graves. La creación y/o pertenencia a un cartel está considerado como una conducta “muy grave”. De acuerdo con fuentes de la CNMC, que citan la literalidad de la ley, para fijar el monto de una multa, el consejo atiende las siguientes variables principales: tamaño del mercado afectado; cuota de mercado de cada una de las empresas intervinientes en el presunto cártel; duración temporal del cártel y beneficio obtenido con las prácticas consideradas prohibidas.Así, las redes tendrían complicado afrontar el pago de una multa del 10% de su facturación anual porque su rentabilidad sobre facturación está muy lejos de esta cantidad. Mientras que hace 10 años, la rentabilidad media por redes superaba el 2% sobre facturación, en los últimos años está en números rojos. El año pasado, el conjunto de los 2.800 concesionarios españoles cerró en equilibrio, con una rentabilidad sobre ventas del 0,09% en el último trimestre. Fue el primer año en el que lograron cerrar en negro desde 2010. Pero habían sufrido un primer trimestre de 2013 con una rentabilidad negativa del 1,5% y también números rojos del 0,7% y del 0,3% en el segundo y el tercer trimestre. Las redes de concesionarios de Volkswagen, Seat, Renault, Audi y Toyota cerraron 2013 en números negros, según datos del sector.Estas son cinco de las marcas que más venden en España y ninguna supera el 1% de rentabilidad. También cerraron en positivo este año los puntos de venta de Skoda, Volvo, Mercedes, Hyundai y Kia, mientras que todavía sigue el calvario de la falta de rentabilidad para las redes de Opel, Citroën, Peugeot, Ford y Nissan. BMW es la menos rentable, con un 1,4% negativo respecto de las ventas. Tras la marca alemana, los más penalizados son los establecimientos de Peugeot, con un 1% negativo sobre facturación.

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