La banca resta importancia a su riesgo con la energía alternativa
El Gobierno quiere conocer de primera mano la situación y el perjuicio que supone para la banca el proceso de reestructuración de las energías renovables en España tras los cambios legislativos que ha sufrido este sector energético en junio pasado. Más ante la previsible avalancha de recursos que el Gobierno prevé que pueden producirse tras el cambio completo del sistema de subvenciones, o primas llevado a cabo en las energías verdes.
Para ello, Industria reunió el lunes en el ministerio a los los principales representantes de la banca española, y más en concreto, de las firmas con mayor riesgo en renovables, Santander, BBVA, CaixaBank y Bankia.
A esta reunión, que se produjo a petición del Gobierno, acudieron el consejero delegado de Santander, Javier Marín, su homólogo de CaixaBank, Gonzalo Gortázar, y el de Bankia, José Sevilla, mientras que por parte de BBVA acudieron Juan Asúa, responsable de banca corporativa del banco, y Manuel Castro, director de riesgos, al no poder asistir su consejero delegado, Ángel Cano. Por parte de Industria acudió Alberto Nadal, secretario de Estado de Energía.
Industria busca saber hasta que punto el drástico cambio legislativo iniciado esta primavera en las renovables puede desembocar en otro grave problema para la banca, sobre todo, para los que más invertido, caso de la gran banca.
Cálculos del Gobierno, expuestos el lunes en la reunión por Alberto Nadal, sitúan la deuda de las entidades financieras españolas en energía alternativa en la nada despreciable cifra de 20.000 millones de euros.
Fuentes financieras elevan la cifra total a unos 40.000 millones de euros de deuda diseminada en 64.400 instalaciones, si se suma también la deuda en manos de la banca extrajera. Pero pese a estas cantidades, y al problema que ha generado el giro normativo la conclusión expusta el lunes por los bancos fue ligeramente más optimista. “No va a ser un nuevo foco de riesgo y por lo tanto de problema para las firmas financieras ya que toda la exposición que tenemos con este sector está provisionada, y refinanciada en gran parte”, asegura una fuente financiera conocedora de lo ocurrido en esta reunión.
La reunión entre Santander, BBVA, CaixaBank y Bankia se produjo un día antes de que el Boletín Oficial del Estado (BOE) publicase la presentación a trámite de 20 recursos para la Sala de lo Contencioso-Adminsitrativo del Tribunal Supremo. Estas reclamaciones parece que son la muestra solo de lo que se considera que será una masiva avalancha de recursos contra el Real Decreto 413/2014, de 6 de junio.
Estos recursos, además, se producen en un momento delicado para la banca española en general y europea en particular. Las principales entidades financieras del continente se encuentran en estos momentos en un proceso de examen por parte del Banco Central Europeo (BCE), quien está midiendo sus riesgos y necesidades de capital.