El tribunal de La Haya condena a Rusia a pagar 50.000 millones de dólares por expropiar Yukos
La Corte Permanente de Arbitraje de La Haya dictaminó hoy que Rusia debe pagar una compensación económica a los accionistas de la liquidada petrolera privada Yukos por su expropiación, una suma que asciende a 50.000 millones de dólares (37.000 millones de euros).
La Corte señaló, por unanimidad, que considera que Rusia tomó medidas que tuvieron un “efecto equivalente a una expropiación de las inversiones de los demandantes” en Yukos, lo que supone una “violación del artículo 13 del Tratado sobre la Carta de la Energía”.
“Como resultado, se ha pedido a la Federación Rusa que pague los daños para compensar a los demandantes”, concluyó este organismo intergubernamental en un comunicado.
La suma que Rusia tiene que abonar es de 50.000 millones de dólares, según detalló en un comunicado Group Menatep Limited (GML), del que dos filiales eran los accionistas mayoritarios de Yukos, si bien la cadena pública holandesa NOS señaló que la parte demandante había solicitado una compensación de unos 100.000 millones.
El arbitraje comenzó en 2005 con una demanda de los antiguos accionistas de Yukos Hulley Enterprises Limited, Yukos Universal Limited y Veteran Petroleum Limited, recordó el tribunal.
El director ejecutivo de GML, Tim Osborne, destacó que se dejó “sin compensación” a los accionistas mayoritarios de Yukos por “la pérdida de su inversión cuando Rusia expropió ilegalmente” la compañía.
“Éste es un paso adelante primordial para los accionistas mayoritarios, que han estado peleando durante más de diez años por esta decisión”, agregó.
La petrolera Yukos, que era propiedad del magnate Mijaíl Jodorkovski, fue acusada por las autoridades rusas de evasión de impuestos en un proceso que, en opinión de la compañía, sólo pretendía conseguir la confiscación de sus activos.
Jodorkovski, el hombre más rico de Rusia, fue declarado por la Justicia rusa culpable de varios delitos económicos y condenado a catorce años de prisión aunque él siempre se declaró inocente y denunció que era víctima de una campaña orquestada desde el Kremlin para privarle de su imperio petrolero. El antiguo magnate fue puesto en libertad tras casi diez años de cárcel en 2013, momento en que abandonó su país.
El ministerio de Finanzas ruso declaró, por su parte, que "debido a que se han encontrado en las decisiones del tribunal de arbitraje considerables defectos de forma, la Federación Rusa recurrirá la decisión en los tribunales de Holanda y espera obtener allí un resultado justo”. Además, en un comunicado colgado en su web, el Ministerio señala que “el Tribunal de Arbitraje no tiene jurisdicción para examinar la cuestión de Yukos, dado que Rusia no ha ratificado el Tratado de la Carta de Energía”.