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Entrevista con Mario Armero, vicepresidente de Anfac

“España va a vivir un renacimiento industrial y el motor va a ser clave”

Las matriculaciones de turismos, vehículos comerciales e industriales llegarán al millón de unidades en 2014 La principal debilidad de la industria del motor son los costes energéticos

El vicepresidente de Anfac, Mario Armero.
El vicepresidente de Anfac, Mario Armero.Pablo Monge

Mario Armero (Madrid, 1958) se declara “optimista”. Optimista ante el futuro del automóvil en España y ante la reindustrialización del país, sus preocupaciones clave en su cargo de vicepresidente de la patronal de fabricantes de automóviles de España. Al frente de una asociación que se dice renovada, destaca que “todas las organizaciones han cambiado por la globalización y la crisis. En Anfac había mucho pensamiento y rigor. Hemos añadido acción, creatividad y comunicación para transmitir al Gobierno, a los agentes sociales y a la propia sociedad la importancia de los sectores industriales”.

Es optimista porque dice que “no se consigue nada llorando” y eso que su sector ha tocado fondo durante los años de crisis, reduciendose a la mitad las ventas de coches en España. En 2013, las ventas de coches cerraron el año en 722.703 unidades, casi un millón menos de lo vendido en 2007 y, siendo tan bajo el volumen de ventas, lo cierto es que el dato supone crecimiento gracias a los planes de estímulo aprobados por el Gobierno desde finales de 2012.

Pregunta. Tenemos PIVE 6, con 175 millones de euros de dotación. ¿Cómo van a cerrar las ventas del año?

respuesta. Sí, creemos que se van a matricular entre 830.000 y 850.000 turismos en 2014. Sumando turismos con vehículo comercial e industrial, llegaremos al millón de automóviles vendidos en el año. Es un dato muy positivo que ocurre gracias a los programas de estímulo, PIVE y PIMA Aire. Son programas de estímulo bien diseñados y ejecutados, que generan dinamismo comercial y actividad industrial, mejoras medioambientales. Europa está estudiando estos programas.

P. Pero, de mantenerse el tirón del PIVE 5, que caducó en cinco meses con el mismo presupuesto, el PIVE 6 no va a llegar a final de año…

r. No, el PIVE 6 durará hasta octubre o noviembre. Trabajaremos con la administración para la continuidad

P. ¿Están ya negociando el próximo PIVE?

r. Desde el día siguiente de la aprobación de un plan, empezamos a trabajar en la aprobación del siguiente.

P. Los PIVE no dejan de ser una ayuda para un sector que ha tocado fondo en los últimos años. ¿Qué nivel de matriculaciones tendrían que darse para que las ventas se mantuvieran sin estímulos?

r. Tenemos que volver a 1,2 millones de turismos vendidos al año, que es lo que creemos que le corresponde a España como mercado natural. Por mucho crecimiento que estemos experimentando ahora, como los volúmenes son muy bajos, no se consigue frenar el envejecimiento del parque automovilístico. Más del 50% de los vehículos que circulan por España tienen más de 10 años. Tenemos que volver a los 1,2 millones y recuperar más de dos millones de coches de déficit de renovación incurridos con la crisis en estos últimos años.

Junto con los PIVE, son muy relevantes los PIMA Aire y Transporte para los vehículos comerciales e industriales. El PIMA Aire ha disparado las matriculaciones de furgonetas, vehículo donde somos primer fabricante mundial. Esperamos un gran impacto para los industriales también con el nuevo plan.

P. ¿Cuándo podríamos volver a ese nivel de demanda anual?

r. Llegaremos hacia el año 2017.

P. ¿Qué deberes tiene la industria y el Gobierno para apuntalar esta cifra?

r. Mantener los planes de renovación PIVE y PIMA, modificar la fiscalidad del automóvil y las leyes financieras. Para que haya más financiación en España, no sólo tiene que haber más inversión en crédito por parte de las entidades bancarias sino también más facilidad para recuperar el vehículo impagado. Estamos esperanzados ante el anuncio del presidente Mariano Rajoy de una nueva Ley de Garantías Mobiliarias.

P. Las adjudicaciones de nuevos modelos y las ampliaciones de producción en las plantas españolas se suceden. ¿Cómo evalúan este crecimiento industrial?

r. En octubre de 2012, presentamos nuestro plan Tres Millones, con el objetivo de llegar a un nivel de fabricación de tres millones de coches anuales en 2017. Estamos ejecutando el plan. En 2013, la producción creció un 10%. En 2014, la producción ya ha crecido un 11%. En los cinco primeros meses del año, España ha superado el millón de vehículos fabricados, que es un dato muy relevante. Vamos a alcanzar los 2,4 millones de coches producidos a final de año. Además, para los próximos meses, esperamos más anuncios de más adjudicaciones de más modelos en España y más inversión.

El automóvil es el sector industrial de mayor crecimiento en España, en capacidad industrial, en exportaciones, en valor añadido… Inglaterra, que está trabajando mucho en recuperar el mercado y la producción, con una recuperación económica más consolidada, tiene como objetivo para el año 2017, volver a fabricar 2,5 millones de vehículos. En ese año en España estaremos en los tres millones de vehículos.

P. Con el plan Tres Millones, revelaron que España atraería 3.500 millones en inversiones. Hace seis meses, apuntaron que esta cantidad se podía duplicar. ¿Qué expectativas tienen ahora? ¿Se duplicarán los 3.500 millones?

r. ¿Y por qué no? En España va a haber un renacimiento industrial y el sector del automóvil puede ser el mayor motor de este crecimiento. Se han comprometido en España en los dos últimos años 3.500 millones de euros. Esto se ha plasmado en nuevos modelos, nueva producción, todas las plantas están ampliando turnos y empleo. Creemos que como mínimo puede haber 1.500 millones de euros más en inversiones de aquí a 12 meses y ¿por qué no pensar en doblar la apuesta de 3.500 millones en los próximos 4 o 5 años? Si hay necesidad de sacar nuevos modelos al mercado…

P. ¿Qué es lo que falta para apuntalar estos tres millones de coches?

r. Nuestra principal debilidad ahora mismo son los costes energéticos. Han aumentado en los últimos años de una forma muy relevante, lo que supone hay un sobrecoste de 10 euros en cada coche que fabricamos por el coste de la energía. Ahí le decimos al Gobierno que somos comprensivos con el déficit de tarifa pero que necesitamos un horizonte de futuro.

Por otro lado, tengo una sensación agridulce sobre la logística. España todavía no tiene el nivel de transporte de mercancías que se merece un país industrial y hay que fortalecerlo. Necesitamos trenes de 750 metros, una red ferroviaria que permita combinar fábrica y puerto y Europa, necesitamos camiones de más de 25 metros y seguir trabajando en la competitividad, eficiencia y reducción de costes de los puertos.

P. Valoran positivamente el diálogo social y la flexibilización de los convenios como herramienta para mejorar la competitividad. ¿Se ha precarizado con ello el trabajo en fábrica?

r. No, hay diálogo social, hay mucha formación y el 80% de los empleados en fábrica tienen contrato indefinido. Aquí se apuesta por las personas, no sólo por el diálogo.

P. ¿Qué le pide al Gobierno respecto de las fábricas?

r. Sensibilidad con la industria. Nos agrada saber que el Gobierno tiene como iniciativa esta reindustrialización. Además del propio ministerio de Industria, el ministerio de Hacienda también es un convencido. Europa y España necesitan reindustrializarse.

P. ¿Cómo casa la reindustrialización de España con el problema de sobrecapacidad de las plantas europeas?

r. En Europa, está habiendo ajustes con este exceso de capacidad pero al mismo tiempo, hay necesidad de adjudicar nuevos modelos en plantas. Es una aparente contradicción que no lo es. Los fabricantes van a adjudicar los modelos en los países que sean más competitivos y de mayor calidad y España ofrece ambas.

P. ¿Compite España sólo con Europa?

r. No, también con países orientales. Alguna adjudicación española, anunciada hace poco, se ha detraído a países como Corea. La competencia es mundial.

P. ¿Cómo valora la reforma fiscal?

r. La reducción del IRPF y del impuesto de Sociedades es positiva para el automóvil pero la tributación específica del motor no va a variar a corto plazo. No hay modificaciones en el impuesto de Matriculación ni en el de Circulación pero seguimos trabajando para que se aplique.

“El sector está bien articulado, no sobra nadie”

La industria del automóvil está presente en tantos y tan variados sectores que los intereses de los agente sociales y empresariales se suceden y se solapan. En los últimos dos años, la asociación de importadores Aniacam ha visto cómo distintas empresas a las que representaba, como Toyota, Lexus, MAN, Hyundai, Kia o más recientemente Fiat, se han pasado a las filas de Anfac, cuando no tienen estrictamente fabricación en España, cambio que Aniacam ha interpretado de “brutal agresión”, en palabras de su presidente, Germán López Madrid a La Tribuna de la Automoción. P¿Se siente respaldada Anfac con la adhesión de estas nuevas marcas?R Nosotros creemos que el sector está bien articulado en cuanto a asociaciones. No sobra nadie. Pero si hay marcas que se quieren venir a Anfac, por el valor añadido que aporta y ejercitan su derecho legítimo de libertad de asociación, , para nosotros es una señal de que estamos haciendo las cosas bien. No tenemos un objetivo de ampliación pero no les vamos a negar la entrada. Ya llevamos dos años con marcas que no fabrican en España y la integración ha sido asombrosa. Y siempre hay una tercera opción y es no estar ni en Anfac ni en Aniacam ni en ningún sitio. P¿Y las relaciones con el resto de asociaciones?R Con las de concesionarios Faconauto y Ganvam, tenemos buena relación. Sólo discrepamos en la Ley de Distribución que ellos quieren recuperar. Creemos que la negociación y los acuerdos privados es lo mejor para resolver temas entre marcas y concesionarios. En otros temas, vamos juntos como en la liberalización de las ITV

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