PSA Peugeot Citröen pierde 2.317 millones de euros en 2013
El fabricante de coches ahonda el agujero de sus cuentas por el deterioro de sus ventas La división automovilística perdió 1.042 millones de euros en el año
El grupo automovilístico francés PSA Peugeot Citroen perdió 2.317 millones de euros en 2013 como consecuencia del deterioro de sus resultados comerciales, sobre todo, en su mercado histórico europeo, aunque esa cifra fue menos de la mitad del agujero récord de 5.008 millones que tuvo en 2012.
PSA indicó hoy en un comunicado que su resultado operativo corriente en 2013 fue de 177 millones de euros negativos, tras los 560 millones de euros también de pérdidas del ejercicio precedente.
El principal motivo fueron los 1.042 millones de euros negativos de la división automovilística (habían sido 1.496 millones en 2012) por una caída de las ventas de vehículos del 5,4 % debido al mal comportamiento de las matriculaciones en Europa
El contrapunto al descalabro en el Viejo Continente vino de China, donde las ventas del grupo francés -en sociedad con su socio local Dongfeng- progresaron un 26 % hasta 557.000 vehículos.
También subieron un 7% en Latinoamérica con 303.000 unidades, mientras que en Rusia retrocedieron un 22,3 % hasta 61.000 coches. Tanto en Latinoamérica como en Rusia, PSA consideró que tiene que mejorar “con la simplificación de las gamas y una mejor integración local para reducir la exposición de estas regiones a las variaciones de tipo de cambio”.
La compañía destacó que, pese al descenso del 4,8 % de los ingresos de esa división automovilística hasta 36.461 millones de euros, el precio medio de sus vehículos aumentó un 0,8 % por el lanzamiento de nuevos modelos y su política de diferenciación de las marcas.
Además, señaló una mejora de los costos de producción y de otros gastos en 933 millones de euros.
El resultado operativo de la filial financiera fue de 368 millones de euros, por debajo de los 391 millones de 2012 en relación directa con un bajón del 17 % de los ingresos hasta 891 millones debido al “contexto europeo” y al encarecimiento de la financiación de sus créditos.
La filial de componentes Faurecia le aportó 538 millones de euros de resultado operativo corriente, por encima de los 516 millones que le había supuesto en 2012, lo que incidió en el alza de su volumen de negocios del 3,8 % hasta 18.029 millones de euros.
Diversos elementos no recurrentes acarrearon a PSA un resultado operativo negativo de 1.169 millones de euros, comparados con los -4.122 millones del ejercicio precedente.
La facturación global de PSA bajó un 2,4 % hasta 54.090 millones de euros por la situación de su negocio automovilístico.
Al finalizar 2013, la empresa tenía una deuda de 4.148 millones de euros, frente a los 3.148 millones de un año antes.
El todavía presidente, Philippe Varin, que será sustituido en las riendas operativas del fabricante francés por Carlos Tavares, comentó que la industria automovilística ha atravesado “años muy difíciles, que han amplificado las dificultades estructurales de nuestro grupo, demasiado centrado en el continente europeo”.
Varin insistió en que frente a esa situación “hemos reaccionado con vigor con medidas de reestructuración difíciles con las que empezamos a ver ahora los resultados, y con el lanzamiento de vehículos en el centro de nuestra gama en 2013 que han superado sus objetivos”.