Berlín acepta acelerar el fondo de rescate bancario pero con normas más duras
Las negociaciones entre el Parlamento europeo y el Ecofin (consejo de ministros de Economía de la UE) continuarán mañana mismo en Bruselas. El ministro griego y presidente semestral del Ecofin, Yannis Stournaras, se ha mostrado hoy satisfecho por el nuevo “margen de maniobra” que le han concedido sus colegas, en particular, el titular alemán, Wolfgang Schäuble.
El presidente del Eurogrupo y ministro holandés, Jeroen Dijsselbloem, aseguró que el compromiso es “cerrar un acuerdo completo antes de finales de marzo”. Dijsselbloem señaló que urgencia no se debe solo a motivos de calendario político (la legislatura termina en abril y las elecciones europeas son en mayo), sino también por razones de urgencia económica. “Tenemos que dar claridad sobre la unión bancaria para que los mercados financieros vuelvan a funcionar con normalidad y apoyen el crecimiento económico”, señaló Dijsselboem al término de la reunión de hoy del Ecofin.
La posición de los ministros y del parlamento continúa alejada, pero tras el impulso de hoy todas las partes parecen decididas a rematar el acuerdo antes de las elecciones europeas de mayo. De ser así, Europa contará con una suerte de FROB europeo, pagado por las entidades financieras, justo a tiempo para el estreno del Banco Central Europeo en noviembre de este año como supervisor único de la banca europea.
El camino lo abrió en gran parte el ministro alemán, quien aceptó que se acelere la creación del fondo, prevista inicialmente a lo largo de 10 años. Schäuble se mostró dispuesto tanto a recortar ese plazo como el de fusión de los fondos nacionales en uno europeo.
El calendario, sin embargo, no está cerrado. El comisario europeo de Mercado Interior, Michael Barnier, apuntó que el nuevo plazo “podría ser de 5 o 7 años”.
Barnier añadió que, en cualquier caso, “el fondo tiene que ser creíble desde el primer día”, lo que obligará a buscar fórmulas transitorias para respaldar el fondo mientras los bancos hacen sus aportaciones (a razón del 1%) de sus depósitos garantizados”.
Holanda propuso que durante ese período autorice al fondo a emitir deuda, con aval público, aunque siempre a condición de que a posteriori los bancos asuman el coste de cualquier reestructuración o liquidación de una entidad.
El ministro alemán advirtió que en ese sentido será inflexible. “Las crisis bancarias las tienen que pagar los bancos”, señaló Schäuble durante la reunión del Ecofin. “Así que necesitamos reglas muy estrictas para que los contribuyentes no tengan que asumir de nuevo la factura o que esta pase de los contribuyentes de un país a los contribuyentes de otro”.
España y 10 países siguen adelante con la tasa Tobin
Los 11 países, entre ellos España, embarcados en la creación de un impuesto sobre las transacciones financieras acordaron ayer seguir con el proyecto. La noticia fue acogida con alivio en el departamento del comisario europeo de Fiscalidad, Algirdas Semetas. El comisario advirtió a principio de mes del riesgo de fracaso que acechaba a la iniciativa como consecuencia de la fuerte presión en contra del sector financiero.
El acuerdo de ayer, según explicó el ministro de Economía, Luis de Guindos, apunta a “una aplicación gradual de la tasa”, comenzando por un activo que “con toda probabilidad, serán las acciones”. El departamento de Semeta considera aceptable esa gradación.
Mañana se reunirán los ministros de Francia y Alemania para negociar otros flecos pendientes. El acuerdo definitivo de los 11 podría cerrarse en las propias semanas y elevarse a la mesa del Ecofin en mayo.