La deuda periférica, en mínimos... ¿cuánto durará el momento dulce?
La rentabilidad del bono español a diez años amanece hoy en mínimos, tras bajar ayer hasta el 3,539%, el nivel más bajo desde marzo de 2006. La prima de riesgo cayó hasta los 185 puntos básicos, si bien hoy ha abierto levemente al alza. El Tesoro tratará de aprovechar este buen momento con dos subastas en las que ofrecerá a los inversores letras, bonos y obligaciones y con las que espera captar hasta 9.500 millones de euros.
También el bono italiano a diez años está en mínimos desde febrero de 2006. En concreto, cerró en el 3,61%. La deuda del país transalpino no se ve perjudicada por el final del Gobierno de Enrico Letta. El presidente Napolitano encargó ayer a Mattteo Renzi, líder del Partido Demócrata, la formación de un nuevo Gobierno. Lejos de esto, la deuda italiana se ve impulsada por la mejora de perspectiva de la agencia Moody’s, que pasó de negativa a estable, conocida este fin de semana.
El bono portugués a diez años, por su parte, está en el 4,82%, en niveles de junio de 2010, y el de Grecia se sitúa en el 7,5%, niveles de mayo de 2010, aunque hace un par de sesiones ya consiguió bajar de esa cota.
Pablo González, consejero delegado de Abaco Capital, piensa que esta relajación en el mercado de deuda periférica responde a tres razones: el exceso de liquidez que hay en el mercado por las políticas expansivas de los bancos centrales, la ausencia de alternativas que ofrezcan interesantes rentabilidades (con el bono germano en el 1,6% y los bonos corporativos de la Europa core moviéndose en niveles poco atractivos) y el mayor optimismo entre los inversores debido al avance de la recuperación económica, que lleva a despejar las dudas sobre los países de la periferia europea.
“Ya con crecimiento económico, la gente tiene más confianza y asume más riesgos”, afirma González. El cambio de percepción respecto a los países periféricos, que en los últimos años habían sido vistos como mercados peligrosos que se debían evitar, es la principal clave de esta tendencia.
En este sentido, Nuria Álvarez, analista de Renta 4, explica que estas bajadas en la rentabilidad de la deuda española a diez años no son sino la continuación de la tendencia que venía marcando. Esta experta coincide en señalar la mejora de la confianza en España como la causa de este hecho. En ese sentido, destaca el apetito por el papel español, con el Tesoro cosechando éxitos en sus emisiones al pagar menos interés subasta tras subasta y lograr una buena demanda.
En este sentido, la evolución que ha seguido la deuda española en los últimos meses es clara. La rentabilidad del bono a una década era hace un año del 5,23% y la prima se situaba en los 360 puntos básicos._A inicios de 2014, el bono estaba en el 4,151% y el riesgo país se movía en los 222 puntos básicos. Al descenso en la prima de riesgo, el diferencial entre el bono español a diez años y su homólogo alemán, contribuyó ayer también la subida del bund, que tocó el 1,7% durante parte de la sesión y cerró en el 1,68%.