El copago farmacéutico genera un ahorro de 1.700 millones
En julio de 2012, el Gobierno puso en marcha el copago farmacéutico con dos objetivos: incrementar la aportación de los pacientes en los medicamentos financiados por la Seguridad Social y rebajar la factura que tienen que asumir las autonomías. Un año y medio después, el balance es positivo, aunque presenta síntomas de agotamiento. En julio de 2012, el gasto farmacéutico en los doce meses anteriores se elevó a 10.876 millones de euros, mientras que en diciembre de 2013 esa cifra ha descendido hasta los 9.183 millones, lo que supone un ahorro de 1.693 millones de euros.
A este ahorro, además del copago farmacéutico, han contribuido también la revisión de los precios de referencia de los medicamentos y el fomento de los genéricos, lo que, sin duda, también ha contribuido a reducir el número de facturas prescritas y al importe medio de las mismas. En esos 18 meses se han recetado 24 millones menos de recetas y el gasto medio por receta ha descendido desde los 11,05 hasta los 10,68 euros, un 3,5% menos.
Esa caída del gasto se está conteniendo. Tras doce meses consecutivos de descensos a tasas cercanas al 20%, el gasto farmacéutico ha subido cuatro meses en 2013, lo que indica que ya se habría alcanzado el ahorro máximo y que a lo largo de este año el importe que van a tener que abonar las autonomías por este concepto va a seguir creciendo.
Una tendencia similar han seguido las recetas y el importe medio de las mismas. En diciembre de 2013 se recetaron 70,8 millones de recetas frente a las 66,4 del mismo mes de 2012. Cuatro millones de facturas más, de las que casi la mitad corresponden a Galicia, en la que se ha pasado de 2,7 a 4,9 millones de recetas en tan solo un año. Ese aumento ha disparado el gasto farmacéutico desde los 31,3 hasta los 57,3 millones.