Promise promete alta corsetería y lencería
Ganarse a los clientes en el probador” es una de los objetivos de Promise, asegura Sergi Flores, gerente y director financiero de la empresa familiar de lencería, corsetería y baño radicada en Sant Pol de Mar, Barcelona.
Iniciaron su actividad en la industria de la confección bajo el nombre de Géneros de Punto Everest en el año 1967, llegando a ser uno de los líderes nacionales en la fabricación de bragas.
La mujer de Flores, Roser Samón, tomó las riendas del patronaje, imprimiendo un nuevo estilo en los productos e introduciendo la corsetería en 1988. También rebautizó el negocio con la marca Promise. “Ahora diseñamos y producimos varias colecciones al año para cubrir todas las necesidades de moda íntima de las mujeres de hoy”, remarca.
“Cubrimos todas las necesidades de moda íntima de las mujeres de hoy”, dice Roser Samón, la diseñadora de Promise
En la franja comercial está “en lo más barato de la línea alta de lencería o en la más cara de la media”, resalta Flores. La gama incluye todas las líneas, desde looks glamurosos y sensuales hasta frescos, y cualquier edad, desde las mujeres más jóvenes hasta las mayores. Sus acabados, prendas sin costuras, la calidad de sus blondas y elásticos cautivan cuando se prueban. Fieles a su nombre, Promise, “gana adeptos cuando se prueba”, insiste Flores.
Samón es consciente de la importancia de unas buenas prendas interiores (sujetadores, corsés, fajas) para realzar la figura, cuando la mujer está eligiendo un vestido de fiesta o ropa ajustada. Se ha convertido también en una experta asistente para aconsejar a las féminas cómo acertar a la hora de elegir la ropa interior y cuidar las prendas de moda íntima.
“Gracias a las ventas internacionales hemos crecido en la crisis”, afirma Sergi Flores, gerente.
La subida de los costes de fabricación llevó a la empresa a abrir fábrica en China en 2004. La contracción de las ventas en el mercado nacional y la apuesta por ganar negocio, la han llevado a crecer fuera de nuestras fronteras en plena crisis. Actualmente la facturación en España supone el 60% del negocio y la internacional, el 40% pero confían en invertir la tendencia en 2015. Avala esta tesis el que “las ventas de productos de lujo siguen en alza”, señala el director financiero.
Desde 2008 han pasado de facturar 8 millones de euros a estimar cerrar el ejercicio 2014 (que concluye en marzo) en 11 millones de euros, lo que supondría un crecimiento del 10% sobre 2013.
Paulatinamente, han ido abriendo nuevos mercados geográficos, añadiendo también nuevas categorías de producto (pijamas y ropa para estar en casa). Así, hace cinco temporadas lanzaron su colección de baño, que poco a poco se ha consolidado. La cifra de ventas de corsetería y la de pijamas representan, cada una de ellas, el 45% de la facturación. El 10% restante pertenece a la línea de baño.
Han conseguido implantarse en EEUU, en tiendas de nivel premium, y en Europa. Cuenta ahora con más de 2.000 puntos de venta, 700 de ellos en Italia. Hace tres años comenzaron con las franquicias. Los países árabes son los clientes que más han crecido en los últimos años.
50 tiendas propias
Salir fuera ha sido la clave que ha permitido a Promise ir creciendo en el negocio de la ropa íntima en plena crisis en España, arañando ventas ejercicio a ejercicio. Cuentan con 2.000 puntos de venta en tiendas multimarca y 50 comercios bajo la enseña de Promise.
Fabrican en China desde hace diez años y cuentan con una plantilla de 25 personas, diez más que en 2008. En los últimos cuatro años han abierto 20 tiendas.
Internacionalmente están presentes en Emiratos Árabes, Siria, Yemen, Líbano, Rusia (San Petesburgo), Italia, Bélgica y Portugal (Oporto).
Cuenta con un amplio catálogo de propuestas para todas las edades y estilos, desde el look más sport al más sexy. Incorpora también líneas para hombres y niños. “Es una firma creada por y para la mujer de hoy, alegre, de espíritu joven y femenino”, resume su diseñadora.
Sobre la firma