España pone broche de oro a las subastas de 2013 con bonos aún más baratos
El Tesoro ha puesto el punto final a las subastas de deuda de 2013 con una colocación de deuda a cinco y 10 años. Ha vendido 1.055,9 millones con vencimiento en 2023 y 1.485,8 que expiran en 2018. En total, 2.541,4 millones de euros, ligeramente por encima de los 2.500 de la parte alta de la horquilla prevista y con una potente demanda que ha superado los 7.800 millones de euros.
Las rentabilidades medias, además, han sido más bajas que las pagadas en las subastas previas a los mismos plazos. A cinco años, pagará el 2,697% frente al 2,722% que ofreció el pasado 5 de diciembre; a diez años ha prometido el 4,098%, por encima del 4,164% del 7 de noviembre.
Esta subasta se ha producido después de que el pasado martes el Tesoro emitiera el máximo previsto en la emisión de letras a 3 y 9 meses y colocara 3.501,19 millones entre los inversores.
De esta forma, el Gobierno ha cerrado las emisiones previstas para este año aprovechando la calma en los mercados y la moderación de la prima de riesgo, que se sitúa actualmente en los 228 puntos básicos.
Con la subasta de hoy, el Tesoro ha captado 127.342 millones de euros en deuda a medio y largo plazo dentro del programa de financiación regular, lo que supera la cifra prevista para todo el año (121.300 millones). El coste medio a la emisión se situaba a 30 de noviembre en el 2,50%, por debajo del 3,01% registrado a finales de 2012.