Pocoyó, en preconcurso: el aviso de la CNMV hunde la emisión de deuda
Zinkia, la empresa creadora y que comercializa los dibujos infantiles de Pocoyó, ha solicitado el preconcurso de acreedores, después de haber tenido que cancelar la emisión de deuda que anunció a principios de mes. La empresa explica la petición del concurso a partir del "análisis de la situación financiera y la previsión de tesorería a corto plazo y ante las dificultades para afrontar los próximos vencimientos".
Sin los fondos procedentes de la emisión de deuda, la situación financiera de la compañía que creó Pocoyó estaba abocada al concurso de acreedores, tal y como advirtió la CNMV en el folleto de dicha emisión de deuda.
"Zinkia no cuenta a corto plazo con liquidez suficiente para atender el pago de sus deudas. A 30 de junio de 2013 presenta un fondo de maniobra consolidado negativo de tres millones de euros. Durante el primer semestre del 2013 su cifra neta de negocios se ha reducido un 48% con respecto al mismo periodo del ejercicio anterior y ha obtenido un resultado consolidado negativo de un millón de euros. Si todas estas circunstancias persistiesen, Zinkia podría incurrir en alguno de los supuestos previstos en la normativa concursal", explicaba dicho folleto, que debe ser siempre aprobado por la CNMV.
Zinkia pretendía colocar 7,78 millones de euros en deuda a tres años, y pagaba un tipo de interés del 11%. La empresa no ha detallado en el hecho relevante comunicado a la CNMV los motivos de la renuncia, si bien el comunicado da a entender que la operación no ha recibido el respaldo de los inversores: "una vez finalizado el periodo de suscripción [...] se informa que Zinkia ha decidido renunciar a la emisión".
La empresa reconoció después del anuncio la difícil situación de tesorería, pero el presidente, José María Castillejo, aclaró después que la compañía no pretendía "tomar el dinero y salir corriendo". El ex consejero de Sanidad madrileño (hoy imputado por cohecho debido a la privatización sanitaria) dimitió este mes de su puesto como consejero y presidente del comité de auditoría.
El artículo 5 bis de la Ley de Concursal, por el que se acoge la empresa dueña de Pocoyó al preconcurso, le permite contar con un plazo de tres meses, ampliable a cuatro, para renegociar su deuda antes de tener que declararse insolvente.