BBVA da por cumplido Basilea III con la venta del 5,1% del chino Citic
El banco afirma que no hay ninguna decisión tomada sobre Telefónica o Garanti
La entrada en vigor de Basilea III, la nueva regulación financiera internacional que comienza a ponerse en marcha desde 2014 penaliza con fuerza las participaciones de la banca. En concreto, BBVA estimaba que el impacto negativo que podría derivarse de su participación del 15% en el chino Citic Bank ascendería a 3.700 millones. Ante esta perspectiva, el grupo ha decidido mover ficha.
La operación anunciada esta mañana, la venta del 5,1% de China Citic Bank (CNBC) por unos 944 millones tendrá un efecto positivo sobre el capital del grupo de 2.400 millones de euros, reforzando su solvencia en 72 puntos básicos, ha explicado el director financiero de BBVA, Manuel González Cid, en una presentación para analistas.
Pese a que la jugada supone dar una amplia cobertura al citado impacto normativo de Basilea III, también conlleva un impacto negativo neto sobre los beneficios del grupo de 2.300 millones de euros este año, y comporta a unas minusvalías económicas de 120 millones.
Con todo, González Cid ha subrayado lo favorable de la operación, realizada “a precio de mercado”, gracias a que el comprador de ese 5,1% es su socio en la zona y matriz de la entidad, el grupo Citic, que ya posee más del 65% de Citic Bank.
BBVA confía en que la operación le permita situarse “cómodamente” por encima del 9% de capital según los nuevos estándares de Basilea III mientras que González Cid ha asegurado a los analistas que el movimiento no tiene por qué tener ningún impacto directo sobre el dividendo del año próximo, del que es “absolutamente independiente” y que se decidirá en función del comportamiento del ejercicio.
Pese a ello, algunos analistas como los de N+1 avanzan que el fuerte impacto que tendrá de una vez la operación en los resultados del ejercicio “probablemente forzará a BBVA a reducir el dividendo de 2013”.
Basilea III
El reforzamiento de la solvencia en 2.400 millones viene en primer lugar de convertir esos 3.700 millones de impacto negativo que tendría, como consecuencia de la aplicación de Basilea III, la participación significativa en Citic en un apunte positivo en capital, al no superar el 10% de participación, el umbral a partir del que la nueva regulación considera como significativa una participación.
A esos 3.700 habría que restarle el impacto negativo de 2.500 millones (que netos, se convierten en los citados 2.300 millones de reducción de beneficio) y 400 millones más al contabilizar la participación como activo ponderado por riesgo.
Finalmente, la operación suma en positivo otros 1.600 millones que se liberan del fondo de comercio, logrando por tanto los 2.400 millones en positivo para la solvencia del banco. Con la jugada, BBVA se garantiza situarse “cómodamente” por encima del 9% para final de este año dando por cumplido ya el llamado “fully loaded” de Basilea III, esto es, la aplicación del nuevo nivel de capital exigido no ya en el periodo transitorio que abre 2014 sino de la implantación plena de la norma, que puede adaptarse en un periodo de cinco años.
Apuesta por China
El banco que preside Francisco González conservará un 9,9% de la participación en la entidad China, que hasta la fecha le había reportado 130 millones de euros en dividendos por el 5,1% del que se deshace. Según los analistas consultados, el 15% les venía reportando unos 600 millones anuales mientras que la nueva situación limitará a algo más de 100 millones por ejercicio.
González Cid ha señalado la importancia estratégica de mantenerse operando en China, un área de negocio que ha comparado a Latinoamérica y en la que seguirá trabajando de la mano de Citic.
Sin embargo, tras la venta de este 5,1% de Citic Bank, BBVA deshace su contrato de colaboración en exclusiva con la firma y se abre la puerta a nuevas alianzas en el gigante asiático. De momento, según ha avanzado el grupo, BBVA prevé abrir oficina en el país para apuntalar su presencia.
El objetivo primordial, según revelan fuentes del sector, es ganar capacidad operativa en las operaciones de grandes clientes que operan entre Asia y Latino América, que BBVA aspira a ir acaparando progresivamente.
Otras participaciones
La reducción de peso en China ha llevado a algunos analistas a cuestionar la permanencia de BBVA en el turco Garanti o en Telefónica, donde el grupo financiero cuenta con un 25% y un 5% respectivamente.
González Cid ha asegurado que no hay ningún decisión tomada al respecto y que la situación del resto de participadas se irá revisando en su momento. En el caso de Garanti, no obstante, BBVA viene ratificando su interés estratégico en reforzar su alianza, pese a la penalización que Basilea III también activaría.
La sinergia comercial entre BBVA y Garanti es, con mucho, más potente que la que ha venido desarrollando con entidades como Citic y analistas como N+1 descartan que la nueva regulación de solvencia vaya a hacer cambiar de idea al grupo español en su apuesta por Turquía.
Créditos fiscales
Finalmente, preguntado por una posible solución del Gobierno para evitar la penalización que Basilea III provoca sobre los créditos fiscales de la banca, el director financiero de BBVA ha adelantado que aún no hay nada cierto sobre lo que manifestarse pero se ha mostrado optimista acerca de una “solución” próxima.