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Los creadores de la cadena se hicieron con la marca en subasta

10 millones de euros separan a los Luengo de Marco Aldany

Los hermanos Luengo tendrán que depositar esta semana el precio de la subasta La operación asciende a 10 millones de euros Perderán 150.000 euros si finalmente no la adquieren

Peluquería de Marco Aldany en Madrid.
Peluquería de Marco Aldany en Madrid.Pablo Monge.

Los hermanos Marcos, Alejandro y Daniel Fernández Luengo, fundadores de la cadena de peluquerías Marco Aldany, tienen esta semana de plazo para pagar la cantidad acordada en la subasta de la unidad productiva de la compañía, celebrada el pasado mes de julio.

La familia fundadora de la empresa, en concurso de acreedores, presentó en la subasta una oferta de 6,5 millones de euros a través de una sociedad creada para participar en dicho proceso, Atlas Proyectos, Construcciones, Reformas y Rehabilitación.

La sociedad Glam & Beauty compitió en la subasta de la unidad productiva de Marco Aldany defendiendo que su plan de negocio era el que ofrecía mayores perspectivas de éxito, gracias al aval profesional de su equipo, formado por José Miguel Murgui (ex director general de la empresa de ingeniería Babcock & Wilcox, con pasadas funciones directivas en multinacionales como J.R. Nabisco, Hasbro Toys Inc. o Procter & Gamble); Carlos Fernández de Araoz (ex vicepresidente y ex director general de la cotizada española GAM Alquiler de Maquinaria, socio de Baring Capital Riesgo); Sergio Rivas (consejero delegado de Dunkin’ Coffee Spain y miembro del consejo de Signium International); Philipp Irling y Begoña Murgui (de Avamura); y Juan Olave (ex director general para España de Burger King).

En un reciente auto el juez del concurso de Marco Aldany, Francisco Javier Vaquer Martín, del juzgado mercantil número seis de Madrid, acuerda la adjudicación de la unidad productiva y de los bienes de The Chic Corporation (Marco Aldany) dando cinco días naturales desde la notificación del auto (el pasado jueves día 10) para formalizar la adquisición.

El magistrado advierte en el auto el hecho de que la compañía entrara en concurso de acreedores por falta de financiación y que no obstante los propietarios sean capaces ahora de afrontar el precio de la operación, que en total, estima el juez, ronda los 10 millones de euros. En el auto se advierte que de no hacerlo perderían la cantidad consignada en la subasta, 150.000 euros.

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