“El pago con móvil será masivo a finales de 2014”
Al frente de la filial española de Visa desde 2004, aguarda con entusiasmo el primer lanzamiento comercial de una aplicación para el pago con móvil en España
Hace poco, Vodafone y Orange anunciaron que a partir de este otoño sus abonados podrán pagar a través del móvil con sus tarjetas Visa y Mastercard, respectivamente, en lo que parece ser el despegue de esta tecnología en España. Luis García Cristóbal, director general de Visa, analiza el avance de este nuevo medio de pago.
Pregunta. ¿Cómo funciona la tecnología de pago con móvil?
Respuesta. El sistema utiliza la tecnología NFC (Near Field Communication), que permite pagar con una antenita contactless [sin contacto] incorporada al móvil. Este se acerca al terminal tres centímetros y la operación se realiza con ese solo movimiento. Es así de sencillo. La NFC es un estándar que han acordado todos los fabricantes de móviles y operadores de telefonía. Por eso, los bancos ya han empezado a invertir en la sustitución o adaptación de todos sus terminales de punto de venta (TPV) y cajeros automáticos.
"A finales de año, 300.000 de los 1,3 millones de datáfonos que hay en España funcionarán sin contacto”
P. Esa es la antena que necesita el móvil para leer los datos de la tarjeta bancaria. Pero ¿cómo se alojarán estos en el teléfono?
R. Hay tres soluciones diferentes y Visa está trabajando en las tres. Una es que las operadoras de telefonía incorporen los datos a través de una aplicación en su tarjeta SIM. Otra, que los fabricantes de móviles, como es el caso de Samsung, por ejemplo, con el que tenemos un acuerdo, los incorporen en el mismo hardware del teléfono. Y hay una tercera opción, que es almacenar los datos en una tarjeta micro-SD como la que usan las cámaras fotográficas digitales.
P. Esta última solución no debe de gustarle mucho a las operadoras...
R. No, porque en caso de cambiar de operador, el cliente no tiene que pedir una aplicación nueva. Simplemente, saca la tarjeta SD del móvil antiguo y la inserta en el nuevo. Sea cual sea la solución escogida, técnicamente no tenemos ningún problema. Mañana mismo podríamos lanzar el sistema de manera masiva. Es más bien un problema comercial, cuya solución exige una serie de negociaciones entre los bancos y las operadoras. Seguramente la solución variará en función de los mercados. En España, donde la mayoría de móviles se distribuye a través de las operadoras, probablemente el elemento seguro [la aplicación donde van los datos de la tarjeta] estará en la SIM.
“En el segundo trimestre hemos visto un repunte en el negocio de las tarjetas que esperamos se consolide”
P. ¿En cuál de las tres soluciones se encuadra la aplicación anunciada por Vodafone en alianza con Visa?
R. Es un acuerdo global que tiene varias fases. Vodafone va a desarrollar un wallet, es decir, un monedero digital, donde el usuario podrá incluir las tarjetas de su banco y una tarjeta prepago de Vodafone. Se trata, por lo tanto, de una solución basada en la SIM del operador.
P. ¿Qué expectativas tienen en esta primera experiencia comercial?
R. Dependemos de la agresividad comercial de Vodafone. Creemos que va a tener una buena aceptación por parte de los clientes. Al final, son estos los que deciden si algo gusta o no, pero la solución es buena y se está aplicando ya en muchos países.
P. ¿Están negociando acuerdos similares con otros operadores?
R. Estamos en conversaciones con todos los operadores de telefonía y fabricantes de dispositivos del mundo. También estamos analizando la posibilidad de que el elemento seguro no esté en el móvil sino en la nube, en internet. Apostamos por esta tecnología porque en 2020 el 50% de las transacciones mundiales se hará con el móvil.
P. Entonces, la pelota está en la cancha de los bancos...
R. Por desgracia para ellos, la Comisión Europea propuso hace unas semanas reducir al mínimo la comisión de intercambio [que abona el banco del comerciante al del cliente cada vez que alguien paga con tarjeta]. Significa que, por un lado, las entidades tienen que invertir millones en adaptar los TPV y, por otro, que sus márgenes son cada vez menores. Desde luego, este es un camino de no retorno. Pero hay que ir paso a paso. No se pueden cambiar todos los terminales en dos meses. Los bancos tendrán que ser muy creativos a la hora de ofrecer servicios de valor añadido a través del móvil.
P. ¿Cuál es la situación en España?
R. Todas las entidades están adaptando sus datáfonos. En España hay 1,3 millones de TPV, de los cuales 275.000 funcionan sin contacto. A finales de año estaremos en torno a los 300.000, es decir, el 30% del parque, y estoy convencido de que a finales de 2014 estaremos cerca del 100%. En paralelo, los bancos llevan emitidas cerca de cuatro millones de tarjetas contactless, pero el próximo año probablemente llegaremos a los diez. El crecimiento va a ser exponencial porque todos tienen en su agenda la transición a la tecnología NFC. España está a la cabeza de Europa en experiencias en este campo. A finales de 2014 empezaremos a ver lanzamientos masivos.
P. ¿Y cuántos smartphones en España están preparados?
R. España es uno de los países del mundo con mayor penetración de smartphones, un 66%. De estos, el 10% cuenta con tecnología NFC. Además, casi todos los modelos nuevos que se están vendiendo en el mercado ya vienen con el sistema.
“El negocio de tarjetas ha vuelto a crecer”
P. ¿Cómo marcha el negocio de tarjetas en España?R. La crisis nos ha afectado en el sentido de que no hemos podido crecer por encima del 10% como lo hacíamos antes. En los últimos años hemos crecido un 3%, 2% o 4%. En los últimos trimestres no habíamos crecido nada en comparación interanual, pero en el segundo trimestre de este año hemos visto un incremento bastante interesante, y estamos esperando los datos del tercero para ver si este cambio de tendencia se consolida o no. Obviamente, es un dato positivo.
P. ¿Este repunte ha sido en volumen de negocio o en número de transacciones?R. En ambos. En los últimos años el volumen se ha mantenido prácticamente plano, con crecimientos del 2% o 3%. En cambio, el crecimiento en el número de transacciones ha sido del 7% u 8%. Eso significa que los titulares siguen utilizando la tarjeta, pero gastan menos, el valor medio es menor. Vamos a ver qué ocurre en el último trimestre de este año. Somos optimistas, todo apunta a que vamos a tener unos resultados positivos. En España hay unos 70 millones de tarjetas en circulación, de las cuales Visa son 47.
P. ¿Coinciden con quienes creen que el inicio de la recuperación está cerca?R. La banca en general se está animando. Las ideas, las estrategias, están claras. Falta inversión en tecnología, pero estamos cogiendo ritmo. Entre todas las tarjetas tenemos una penetración del 17% sobre el consumo privado, con lo cual todavía tenemos un margen de maniobra tremendo. Y por otro lado, la mayoría de bancos tiene muy claro que el futuro está en los medios de pago, sean móviles o tarjetas.
P. ¿Es cierto que los datáfonos contactless son más caros que los normales?R. No es cierto, en España los terminales son gratis. En el 95% de los casos, el banco se los regala al comercio. Así que a este debe importarle muy poco si el datáfono cuesta más o menos porque el coste lo asume el banco. Quizá un día deje de ser así, puesto que nos presionan por todos lados y alguien tiene que pagar la inversión en tecnología, pero el coste será de unos 15 o 20 euros más.