Vodafone negocia con Verizon la venta de su 45% de Verizon Wireless
La operación rondaría los 130.000 millones de dólares
Sacudida en las telecos de todo el mundo. En un hecho relevante remitido a la Bolsa de Londres, Vodafone ha explicado que está en negociaciones con la estadounidense Verizon para la posible venta de Vodafone USA, cuyo principal activo es el 45% en Verizon Wireless, la mayor operadora de móviles del país. El grupo británico advierte, no obstante, de que no hay certidumbre de que el acuerdo sea alcanzando.
El anuncio ha tenido un impacto de gran resonancia en los mercados financieros. Y es que las acciones de Vodafone se han disparado casi un 10%, alcanzando un máximo anual por encima de los 207 peniques. De hecho, es el precio máximo de las acciones de Vodafone en los últimos 12 años.
Según Bloomberg, la operación podría rondar los 130.000 millones de dólares (unos 98.000 millones de euros). Verizon estaría negociando con un conjunto de bancos para captar una línea de financiación de 60.000 millones de dólares (cada entidad proporcionaría a la operadora préstamos por cerca de 10.000 millones). En principio, el acuerdo podría alcanzarse la próxima semana.
En cualquier caso, a lo largo de los últimos meses los analistas habían sugerido que Verizon podría pagar cerca de 100.000 millones por la participación de Vodafone en su filial de móviles, si bien en el mercado se ha estado comentando que el grupo británico no ha dejado de insistir en pedir cerca de 130.000 millones.
Como parte de la transacción, Verizon vendería su 23% en Vodafone Italia al propio grupo británico, por cerca de 4.000 millones de euros.
La compra sería un paso más en el proceso de consolidación que ha experimentado el sector estadounidense de las telecos. Y es que el Mercado de EE UU se ha visto sacudido por las operaciones corporativas en los últimos tiempos. En mayo, Deutsche Telekom completó la fusión de su filial estadounidense T-Mobile USA con MetroPCS, y en julio la nipona SoftBank cerró la compra de SprintNextel, tercer operador de móviles del país, por cerca de 21.600 millones de dólares.
Además, la operación tendría una influencia en el conjunto del sector de las telecomunicaciones, no sólo en EE UU, sino en todo el mundo. Vodafone, siguiendo su estrategia de vender los activos en los que no tiene la gestión (tal y como sucedió, por ejemplo, con la francesa SFR, además de otras participaciones en Polonia y Asia), saldría del mercado norteamericano, si bien captaría fondos para reforzar su presencia en Europa.
En este momento, por ejemplo, está en proceso de compra de la alemana Kabel Deutschland, por cerca de 7.700 millones de euros. Diversos medios italianos publicaron a principios de este verano que Vodafone había mostrado interés en adquirir la transalpina FastWeb.
Distintos expertos han coincidido en que está política de expansión en Europa también incluiría a España, donde Vodafone podría intentar la compra de una operadora de cable o telefonía fija para impulsar sus ofertas convergentes, uno de los modelos comerciales claves actuales en el sector.