Las Eafi buscan su lugar en el mercado
Intentan aprovechar la crisis de la banca, todavía con excaso éxito
Mientras que en España hay 118 empresas de asesoramiento financiero Independiente (Eafis), en algunos países de Europa como Reino Unido el número ronda los 10.000 y más del 90% de los inversores utilizan asesoramiento independiente a la hora de crear y gestionar sus carteras. Las opiniones de los inversores cada vez son menos favorables hacia los bancos y más favorables hacia estas figuras independientes, hoy en día el 80% los prefiere, según un estudio llevado a cabo por el instituto de estudios bursátiles (IEB).
Las Eafis son empresas que se dedican exclusivamente a prestar servicios de asesoramiento financiero a sus clientes y se deben distinguir de aquellas que gestionan o distribuyen productos financieros. Muestran una gran diferencia con los bancos o gestorías ya que no están vinculadas a una sola entidad financiera. De hecho, esta es la gran característica que les avala como asesores independientes.
Para poder acudir a ellas no importa el volumen de patrimonio que queramos invertir, ya que se puede contar con una Eafi desde volúmenes de activos menores y mejorar mucho la gestión y tranquilidad patrimonial. Lo que debe importar a la hora de acudir a una de estas empresas es la calidad del servicio que se quiere recibir y las necesidades particulares de cada titular de patrimonio. Los asesores propietarios de Eafis realizan un símil médico que puede ayudar a entender mejor su concepto, “La Eafi es como un médico de cabecera. Nunca nos preguntaríamos a partir de cuántos grados de fiebre hay que acudir al médico, o al menos eso sucedía antes de que apareciera instalada la figura de Internet, ya que nadie leía y sacaba conclusiones de su propio diagnóstico.” Siguiendo con la medicina aconsejan “La Eafi es el ambulatorio de proximidad que diagnostica y emite un tratamiento para prevenir males mayores. Desde luego el paciente nunca debe de esperar a que su salud financiera sea terminal, porque ya no se podrá hacer nada”
Convertibles, deuda subordinada, preferentes, hipotecas, cláusulas suelo… son algunos de los problemas con los que lidian las redes bancarias. Pero hoy en día todavía el porcentaje de inversores que acude a las entidades en busca de asesoramiento es del 87,3% según un estudio realizado por el instituto de estudios bursátiles (IEB). En frente se encuentran los asesores independientes a los que los inversores cada vez valoran más ¿son el futuro del sistema? Entre las características más valoradas se encuentran la formación (64%) y la experiencia (59%) según el mismo estudio del IEB. En un país bancarizado como España, los asesores financieros independientes o Eafis dicen diferenciarse de sus competidores convencionales en cuanto calidad, diversificación, transparencia y por no tener conflictos de interés. Resulta asombroso entonces que durante este año el porcentaje de inversores que acuden a esta figura en busca de asesoramiento haya descendido desde el 36% recogido en 2011 al 24,8% de 2012.
¿Cómo invertir?
Como primer paso es importante saber que es una buena inversión. Una buena inversión, según las Eafis, se caracteriza por ser segura, liquida y rentable. El segundo paso según los asesores es tener claro el concepto de diversificación y “diversificar, diversificar y diversificar”. Después analizar dónde invertir, en base al sector, tamaño y ubicación. Por otro lado elaborar una combinación de posiciones largas y cortas utilizando enfoques cuantitativos para la determinación de las mismas.
Cuando se compran activos, se compra correlación (con el mercado) y volatilidad. Una buena cartera ha de tener, en la medida de lo posible, baja volatilidad y correlación con el mercado.
La correlación depende de que los mercados internacionales. Hoy en día cada vez están más correlacionados y se espera que continúe aumentando. En cuanto a la volatilidad, reducirla depende de que la cartera esté formada por distintos activos.
Varios debates están en auge en el mundo de los asesores independientes en España y uno de los más controvertidos es la labor de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) en los procesos de autorización a la hora de poder inscribir una Eafi y tras la inscripción. Los asesores financieros argumentan que si pueden ser una persona física no es lógico que más del 80% de su tiempo se vea empleado en tareas administrativas muy complejas que según consideran son del todo innecesarios.
Las Eafi creen que la Comisión debería intervenir poco en la posautorización y que deberían funcionar como punto de apoyo ante posibles dudas y confusiones, es decir que actuaran como un organismo de ayuda y no como organismos barrera, explica Francisco Álvarez Molina, presidente de Ética, primera empresa de asesoramiento financiero instaurada en Valencia y exdirector de la Bolsa de la misma ciudad.
Desde CNMV rebaten que a la hora de dar autorizaciones se tiene que garantizar que estas empresas puedan ofrecer los servicios por los que se están inscribiendo y tras la autorización se deben asegurar de que esos servicios se van a seguir dando en el tiempo. Sobre la idea de que la mayoría de Eafis se ven catalogadas como si de agencia de valores se trataran aseguran que para inscribirse como agencia de valor los requisitos son más fuertes que para inscribirse como Eafi ya que no son lo mismo y no son consideradas lo mismo y que las exigencias que se piden tras la inscripción tampoco lo son.
Los asesores financieros independientes no están organizados, no forman una asociación definida y esto les acarrea importantes problemas. Francisco Álvarez ha hecho un llamamiento en las jornadas de Inversis: deben dejar el orgullo a un lado y luchar juntos por sus derechos en lugar de preocuparse por quién debe estar a la cabeza de la asociación. Con un número tan reducido de Eafis en España comparado con los números de otros países de Europa, 118 frente a las 5.000 o 10.000 de otros países europeos, es difícil entender cómo no pueden ponerse de acuerdo. Aunque hay varios puntos que tienen claro, deben tener más visibilidad en los medios para que la gente los conozca y cambien su opinión sobre “los malos de la película”, que es como con cierta sorna se dicen llamar debido a que se ven dignificados por “los bancos que venden lo que les interesa a ellos y no al cliente”.
Seguir el modelo francés
El objetivo común para las Eafis, en cuanto a modelo de organización se refiere, es caminar hacia el ejemplo francés frente al inglés.. En el primero por un lado están los bancos y las aseguradoras como distribuidores de producto y por otro los asesores financieros que se encuentran autorregulados con una serie de normas y registros que todos tienen que cumplir. El inglés funciona por acreditaciones que dependen del Financial Stability Board, la CNMV española; estas certificaciones permiten asesorar por grados, cuanto más grado se tiene más se puede asesorar. Estos grados de conocimiento van en paralelo a la experiencia, cuanta más experiencia más valoración.
En cuanto al modelo al que se dirige el sistema español, Miguel Ángel Bernal Alonso, coordinador del departamento de investigación del Instituto de Estudios Bursátiles, admite no saber hacia dónde se dirige debido a que ve a la CNMV parada, pero también admite no ver presión por parte de los asesores. Denuncia que hay EAFIS registradas que no aparecen en la página de la Comisión y que esto no debería suceder ya que es lo que da a lugar a las confusiones por parte de los clientes y a la mala imagen de los propios asesores y que si además lo suman al intrusismo tienen un grave problema. La CNMV está muy preocupada por lo que llaman “chiringuitos” y efectivamente se puede estar construyendo una especie de bolsa de “chiringuitos financieros” por el intrusismo, dice el profesor y lo que la Comisión debería de hacer sería identificar lo que conlleva la figura de asesor financiero y definirla para poner límites en su figura porque lo que ocurre es que las fronteras no están bien marcadas entre lo que son asesores financieros independientes y consultores y añade que ambas figuras deberían de estar reguladas.
En España aunque este colectivo ya lleva algunos años existiendo no están organizados, no tienen reuniones entre ellos, no tienen contacto con los medios a nivel conjunto… pero todos los integrantes están seguros de que es necesaria la creación de una asociación que trabaje en nombre de todos.