Apple, del no dividendo al dividendo récord
Aprueba el mayor plan de recompra de acciones de la historia
La dura caída de Apple en Bolsa desde el pasado mes de septiembre, que ha llevado a sus títulos desde los 705 a los 400 dólares, ha obligado a su consejo de administración a tomar decisiones drásticas. Durante esos meses, las presiones de los grandes inversores se dirigieron a forzar a la empresa a elevar la retribución a los accionistas, que no ha tenido más remedio que dar un giro total con respecto a la política aplicada por Steve Jobs durante años. Del “no dividendos” y “no recompras”, se ha pasado a pagar unos dividendos millonarios, procedentes de la multimillonaria tesorería de Apple. Y es que el tesoro de la empresa de la manzana supera los 144.700 millones de dólares entre liquidez, inversiones a corto plazo e inversiones a largo plazo.
Bajo los nuevos planes, anunciados durante la presentación de los resultados del su segundo trimestre fiscal, Apple devolverá a los accionistas cerca de 100.000 millones de dólares (casi 77.000 millones de euros) hasta 2015 (más de 30.000 millones por ejercicio).
Apple abonará un dividendo anual de 12,20 dólares por acción, un 15% más que en el ejercicio anterior, lo que implica un desembolso anual por este concepto para los inversores de 11.500 millones de dólares, una cifra superior a la capitalización bursátil de cerca de 200 empresas del S&P 500. “Es uno de los mayores dividendos de las empresas estadounidenses”, dijo Peter Oppenheimer, director financiero de Apple, durante la call conference con inversores que siguió a la presentación de las cuentas de su segundo trimestre fiscal.
Además, la compañía destinará cerca de 60.000 millones a recompra de acciones hasta 2015 (el plan anterior contemplaba destinar a este apartado cerca de 10.000 millones), lo que implica, un desembolso mensual de 1.800 millones, según las estimaciones de Morgan Stanley, frente a los 490 millones que establecía el plan anterior. “Es el mayor plan de recompra de acciones aprobado por una empresa en toda la historia”, señaló Oppenheimer, quien indicó que este programa muestra la fortaleza de la compañía.
Bajo estas estimaciones, el banco de inversión indica que Apple ofrecerá una rentabilidad por dividendo del 3%, y una rentabilidad total del 7,4% para los accionistas.
De igual forma, en una casi sorprendente decisión, el plan de Apple pasa por emitir deuda por primera vez, para financiar tanto la recompra de acciones como los dividendos. El movimiento estaría justificado en los menores costes en los que incurriría la empresa por esta vía que en repatriar los fondos que tiene en los mercados internacionales, puesto que tendría unas cargas fiscales muy superiores. La compañía tiene en la actualidad un total de 102.000 millones de dólares fuera de EE UU.
Oppeheimer, no obstante, aseguró que Apple mantendrá la suficiente liquidez en EE UU para mantener sus estrategias de crecimiento y financiar tanto la inversión en I+D como en posibles adquisiciones. El ejecutivo aseguró que la empresa espera que tanto la tesorería, tanto en EE UU como en los mercados internacionales, siga creciendo hasta 2015.
A partir de estas decisiones en el ámbito de la retribución a los accionistas, en el mercado también se han empezado a plantear las cuestiones sobre si la estrategia de Apple es la correcta o si debe introducir cambios. Tim Cook, consejero delegado de Apple, quiere que los inversores cambien su manera de pensar con respecto a la compañía de la manzana. El directivo quiere que vean a la empresa menos como una start-up de fuerte crecimiento, y más como una madura pero robusta compañía tecnológica, con el mayor dividendo del mundo.
En la call conference con inversores, Cook reconoció que la fuerte caída de las acciones de Apple en los últimos dos trimestres ha sido algo muy “frustrante para todos nosotros”. El directivo, no obstante, aseguró que el negocio ha permanecido muy fuerte y “continuaremos haciendo lo mejor”.
Cook indicó que Apple no puede controlar factores como los tipos de cambio, la evolución de la economía en diversos países o cierto control de los costes, si bien insistió en que Apple sigue teniendo bajo control su estrategia de creación de productos innovadores.