Bankinter renueva su oferta con un depósito al 2,75%

El importe mínimo, 15.000 euros Disponible hasta el 31 de mayo

Desde que Luis María Linde emitiera sus recomendaciones para poner freno a la guerra del pasivo las entidades se han ajustado a los topes establecidos por el Banco de España. El objetivo, evitar futuras penalizaciones en los ratios de capital. Así, a día de hoy es difícil encontrar depósitos a un año con una rentabilidad superior al 1,75% o a dos por encima del 2,25%. Ante este panorama las entidades han decidido ampliar los plazos a 13 o 25 meses para esquivar al supervisor.

El último en recurrir a esta estrategia ha sido Bankinter. La entidad pone a disposición de los pequeños ahorradores un nuevo depósito a 25 meses al 2,75%. Todos los que estén interesados, sean o no clientes del banco, podrán contratarlo hasta el 31 de mayo o en su defecto hasta que se alcancen el importe global ofertado, es decir, 500 millones de euros.

El importe mínimo requerido son 15.000 euros y los clientes pueden contratarlo a través de la red de oficinas del banco, banca telefónica y canal móvil, tal y como aparece recogido en la nota de prensa.

En caso de que el ahorrado necesite el dinero dispone de la posibilidad de cancelación anticipada. Eso sí en estos casos la rentabilidad prometida se verá menguada. En concreto, la rentabilidad del importe cancelado se quedaría en el 1,5% de interés nominal anual durante el primer año; en el 2,25% durante el segundo; y a partir de ahí y hasta vencimiento, en el 2,75%.

Los pequeños inversores han sido testigos de las sucesivas rebajas en los tipos de interés desde comienzos de año. Lejos queda la época en las que las entidades apostaban con fuerza por políticas comerciales agresivas que tenían como objetivo captar liquidez. En aquel entonces las rentabilidades prometidas podían llegar a rozar el 5%. Sin embargo, en enero Linde decidió acabar con la fiesta para evitar futuras sorpresas. En concreto, la decisión del regulador lo que buscaba era impedir que las entidades se vieran inmersas en una guerra que lo único que podía traer consigo era un mayor deterioro en las cuentas de resultados.