La sociedad mixta Madrid Calle 30 retorna a los beneficios en 2012
La reestructuración de su deuda permite pasar de unas pérdidas de 23 millones en 2011 a un beneficio neto de 54,6 millones el año pasado Repartió 42,6 millones en dividendos
Esta sociedad mixta es la encargada desde su constitución en 2005 de la reforma, conservación y explotación de la carretera M-30, una de las principales arterias del tráfico de Madrid y su área metropolitana. Así, su principal fuente de ingresos es el canon que le abona el Ayuntamiento por la prestación de sus servicios. Tal y como explica la entidad en el informe de sus cuentas correspondientes a 2012, al que ha tenido acceso CincoDías, el importe comprometido por el Ayuntamiento de Madrid en su presupuesto asciende a 64 millones de euros para el segundo semestre de 2011 y establece una contraprestación anual máxima de 128,7 millones hasta 2040, fecha en la que vence su contrato con la Administración local. Con todo, el año pasado logró un beneficio después de impuestos de 54,6 millones de euros, que contrasta con los 23 millones netos de pérdidas obtenidos un año antes.
En un negocio tan estable como el que opera esta entidad, ¿cómo se explica un cambio tan brusco de un ejercicio a otro? La explicación hay que buscarla en la subrogación del Ayuntamiento de Madrid de la deuda relativa a la financiación ajena de Madrid Calle 30 S.A., incluyendo los derivados financieros de cobertura asociados a la misma, con efectos contables a partir del 30 de junio de 2011. Como consecuencia de dicha subrogación, la sociedad registró la baja de los pasivos financieros subrogados por un valor cuyo importe asciende a 2.226 millones de euros y otros 72 millones correspondientes a derivados.
Fruto de esta operación, se generó un derecho de cobro, registrado en el balance de 2011, por importe de 512 millones. La compensación de los créditos y débitos entre la empresa mixta y el Consistorio supuso la modificación del Plan Económico Financiero inicial previsto para esta compañía y se encuentra detrás de ese ejercicio aparentemente tan negativo para sus cuentas como fue 2011.
Además, la Junta General Extraordinaria de Accionistas con fecha 29 de octubre de 2012 aprobó una reducción de capital, mediante la amortización de 9.345 acciones con un valor nominal de 10.000 euros cada una y su devolución a los accionistas. Así, el capital social al cierre del ejercicio de 2012 asciende a 387 millones, materializado en 38.710 acciones de 10.000 euros de valor nominal. A dividendos destinó 42,6 millones.
A pesar de haber retornado a los beneficios el año pasado, la creación de esta empresa siempre estuvo rodeada de polémica, ya que en origen constituyó el intento de los entonces gestores del municipio (con Alberto Ruiz-Gallardón, al frente) de que el elevado coste de remodelar esta infraestructura, de más de 3.000 millones de euros, no contabilizara como gasto público. Para ello, se constituyó como sociedad mixta, cuyo capital se repartió entre el 80% de titularidad pública correspondiente al Consistorio y el 20% de capital privado, distribuido por igual entre sus dos socios: ACS y Ferrovial. A cambio de adelantar esta entidad buena parte del dinero necesario para acometer las obras de reforma de la carretera, una vez concluidos los trabajos se encargaría durante 35 años (hasta 2040) de su explotación y mantenimiento. Por ese servicio cobraría un canon anual del Ayuntamiento. Ese pago se compone de una parte fija y otra variable, que depende de la calidad con que se preste el servicio. Por ello y a la vista del escaso riesgo que asume la iniciativa privada según el contrato, Bruselas dijo no y el endeudamiento de Madrid Calle 30 no pudo sacarse fuera de las cuentas municipales. El PSOE promete que disolverá esta sociedad cuando gobierne en la ciudad.
La remuneración de sus directivos sumó 174.867 euros
Otro de los aspectos incluidos en las cuentas es el capítulo de retribuciones al Consejo de Administración y a la alta dirección de esta entidad.
En 2012 el personal de alta dirección, que incluye a los miembros del Consejo de Administración que realizan labores ejecutivas, percibió remuneraciones por importe de 174.867 euros por todos los conceptos (177.035 euros en 2011). Además, especifica que la alta dirección no tiene concedidos anticipos, créditos o avales. Asimismo, la sociedad no tiene contraídas obligaciones en materia de pensiones y se seguros de vida con respecto al personal de alta dirección. En cuanto al futuro más inmediato, la empresa no contempla acometer ninguna reducción de plantilla este año (cuenta con un total de 13 empleados) y sí aumentar sus ingresos por prestación de servicios de los 111,3 millones contabilizados en 2012 a un total de 114,5 millones. Con ellos, espera obtener un resultado de 81,04 millones antes de impuestos.
La empresa cambia de auditora y contrata a Deloitte en lugar de KPMG
El informe de gestión de las cuentas de Madrid Calle 30 revela además de todos los datos contables que durante 2012 los honorarios relativos a los servicios de auditoría de cuentas prestados por la auditora de las cuentas, que fue Deloitte, fueron 18.000 euros. Sin embargo, un año antes la empresa auditora KPMG facturó un total de 41.000 euros, de los que 35.000 correspondieron a servicios de auditoría y 6.000 a otros servicios.
En opinión de Deloitte, las cuentas anuales de 2012 expresan la imagen fiel delpatrimonio y situación financiera de la entidad a 31 de diciembre pasado, así como los resultados de sus operaciones y sus flujos de efectivo. Recuerda que en febrero de 2012 otros auditores emitieron informes con opinión favorable sobre las cuentas de 2011. Sí llama la atención Deloitte sobre el hecho de que la sociedad realiza la práctica totalidad de sus ventas y compras con entidades del grupo y asociadas, sin que ello afecte a su opinión de auditoría.