El sector energético español suspende en sostenibilidad
En 2011 aumentaron las emisiones de gases de efecto invernadero Este informe es el sexto que realiza el Observatorio de energía y sostenibilidad de España
El sector energético español suspende en sostenibilidad y acusa la falta de una visión a largo plazo, según el informe del 2012 del Observatorio de Energía y Sostenibilidad en España, presentado hoy por la Escuela Superior de Ingeniería ICAI.
El informe, elaborado en el marco de la cátedra BP de energía y sostenibilidad del ICAI, destaca que en 2011 aumentaron las emisiones de gases de efecto invernadero, los costes externos asociados a las emisiones y la dependencia energética.
“La sostenibilidad del sector energético empeoró mucho en 2011”, ha asegurado el coordinador de la cátedra, Pedro Linares, quien ha explicado que ahora es cuando se disponen de todos los datos oficiales de ese año.
El aumento en las emisiones fue consecuencia del mayor uso de carbón, derivado de la obligación de quemar carbón nacional, que “paradójicamente”, según ha dicho, implicó un aumento del uso del carbón importado y de la dependencia energética.
En cuanto a la generación de valor añadido por el sector energético, se reduce dos tercios cuando se descuentan los costes externos de las emisiones de contaminantes, por los daños a la salud y al medio ambiente.
El 76 % de ese valor añadido lo aporta el sector eléctrico, ya que la falta de costes externos significativos asociados a las renovables “amplifica” su contribución al valor añadido de la economía y a la seguridad energética.
Sobre la moratoria a las primas aprobada en 2012, el director de la cátedra, José Ignacio Pérez Arriaga, ha asegurado que “tal vez era interesante”, pero que “no tiene sentido no dar objetivos de futuro ni un régimen estable a un sector pujante como las renovables”.
“En España falta una política energética con visión a largo plazo y vocación de sostenibilidad”, ha comentado Pérez, quien considera que actualmente la política se define por “improvisación, inseguridad jurídica y falta de transparencia”.
Algo que no tiene sentido para Pérez es la falta de atención a la eficiencia energética, “la medida con un mejor ratio coste beneficio” para lograr un modelo más sostenible.
El informe destaca la “enorme paradoja” que supone que España tratara de vetar -y votase en contra- la nueva directiva europea sobre eficiencia energética, aprobada a finales de 2012.
Pérez también ha criticado las medidas del Gobierno encaminadas a taponar el “monstruoso” crecimiento del déficit de tarifa en la electricidad, que “sobre todo” recaen en los consumidores y están planteadas “sin lógica aparente”.
Los precios de la electricidad, que en 2011 crecieron más que los europeos y superan en términos absolutos a la media de la UE, “tienen que reflejar los costes”, ha destacado Pérez.
Este informe es el sexto que realiza el Observatorio de energía y sostenibilidad de España, fruto de la cátedra fundada en 2002 por la petrolera British Petroleum y el ICAI.