Las grandes inmobiliarias triplicaron sus pérdidas en 2012
Por la realización de provisiones por la depreciación de sus activos
Las grandes inmobiliarias triplicaron sus pérdidas en 2012 hasta superar 3.000 millones de euros, debido a la realización de provisiones por la depreciación de sus activos.
Las empresas más importantes del sector, uno de los más vapuleados por la crisis, acumulan además una deuda que supera los 23.000 millones de euros.
Aunque el principal lastre para estas compañías han sido los saneamientos extraordinarios, su beneficio también se ha visto reducido por la caída del valor de los inmuebles, los menores ingresos por ventas o alquileres y el pago de sus gastos financieros, entre los que destacan los intereses devengados de su colosal deuda.
En concreto, la cifra de negocio de las inmobiliarias españolas ha caído hasta 1.663 millones de euros, frente a 2.005 millones registrados en 2011, lo que supone un descenso del 17 %.
Sólo Renta Corporación y Testa -la sociedad de patrimonio de alquiler de Sacyr- han conseguido esquivar las pérdidas este ejercicio.