La CNMV y Sareb, probables administradores de Reyal Urbis
La CNMV designará uno de los administradores concursales de Reyal Urbis. Sareb, como primer acreedor de la inmobiliaria, nombrará previsiblemente otro de los administradores.
El segundo mayor concurso de acreedores de una empresa sucedido en España, el solicitado esta semana por Reyal Urbis, provocará previsiblemente el concurso que más honorarios pague a los administradores que nombre el juez. Abogados y economistas se posicionan para gestionar el concurso de la inmobiliaria, por el que recibirán varios millones de euros.
Será el juzgado mercantil número seis de Madrid, el mismo que tramita, entre otros, el concurso de Afinsa, el que nombre la composición de la administración concursal de Reyal Urbis. El juez nombrará dos administradores concursales, uno en nombre de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) y otro en el del mayor acreedor. Cada administrador nombrará a su vez a varios auxiliares.
De acuerdo al artículo 27.2 la Ley Concursal, en el caso de caso de concurso de una entidad cotizada “será nombrado administrador concursal un miembro del personal técnico de la Comisión Nacional del Mercado de Valores”. La CNMV suspendió el martes la cotización de Reyal Urbis, tras anunciar la empresa su entrada en concurso. Ese día cerró a un precio de 0,12 euros por acción.
A finales de julio de 2006 Rafael Santamaría, a través de Reyal, lanzó una opa acordada con los principales accionistas de Urbis (Banesto), en una operación valorada en 3.317 millones de euros. El valor de la acción de Reyal Urbis era superior a los 10 euros entre 2006 y 2007. El pinchazo de la burbuja inmobiliaria y las dificultades de la compañía para refinanciar su deuda han ido lastrando su valor de mercado. En la actualidad, el valor total de Reyal Urbis en Bolsa es sólo de 36,2 millones de euros.
El concurso de Reyal Urbis será considerado, previsiblemente, como de especial trascendencia. El artículo 27.bis de la Ley Concursal señala que serán concursos de especial trascendencia aquellos en los que el importe de la masa pasiva declarado por el concursado sea superior a cien millones o que el número de acreedores sea superior a mil, entre otros puntos, condiciones que cumple el proceso de Reyal Urbis.
La normativa indica que en caso de concursos ordinarios de especial trascendencia el juez nombrará “a un administrador concursal acreedor titular de créditos ordinarios o con privilegio general no garantizado de entre los que figuren en el primer tercio de mayor importe”. De acuerdo al comunicado de Reyal Urbis sobre su entrada en concurso de acreedores, la primera entidad acreedora es Sareb. Por lo que el organismo presidido por Belén Romana nombrará previsiblemente a otra de las personas que formarán parte de la administración concursal de la empresa.
El artículo 27.bis de la Ley Concursal añade que el el juez “en aquellos concursos en que exista una causa de interés público que así lo justifique y aun cuando no concurran los supuestos mencionados en este artículo, podrá nombrar como administrador concursal acreedor a una Administración pública o a una entidad de Derecho Público vinculada o dependiente de ella”. En el caso de Reyal Urbis, uno de los mayores acreedores es Hacienda, que tiene pendiente de cobro cerca de 400 millones de euros de la inmobiliaria. Siendo el concurso de Reyal un proceso de especial trascendencia y siendo Hacienda un acreedor tan importante de la compañía, es posible que también el organismo público designe una persona que forme parte del equipo de la administración concursal nombrado por el juez.
Santander, el principal banco con el que ha trabajado Reyal, ha sido uno de los mayores acreedores de la inmobiliaria. Al ser Banesto otro de los primeros bancos de Reyal, el magistrado podría inferir la existencia de una vinculación especial con Santander y obviar el posible nombramiento de este como administrador, según expertos en materia concursal consultados.
UN CONCURSO DE 10 MILLONES
El concurso de Martinsa Fadesa, el mayor ocurrido en España, con 7.000 millones de deuda, generó los mayores ingresos pagados nunca a una administración concursal. Básicamente, la retribución de los administradores concursales depende del pasivo y de la complejidad del concurso de la compañía en cuestión: a más deuda, más retribución para la administración concursal. Fuentes cercanas a Martinsa Fadesa estiman que los administradores de la inmobiliaria presidida por Fernando Martín recibieron en total 20 millones de euros por su labor.
Reyal Urbis informó a la CNMV a finales de noviembre de que el total de su deuda ascendía a 4.301,7 millones de euros. La administración concursal de Reyal podría recibir una retribución cercana a los 10 millones de euros, según estimaciones de expertos en la materia.